𝐁𝐎𝐇𝐄𝐌𝐈𝐀𝐍 𝐑𝐇𝐀𝐏𝐒𝐎𝐃𝐘 [𝑹𝒐𝒈𝒆𝒓 𝑻𝒂𝒚𝒍𝒐𝒓]

•¿Separation?•

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Londres, 1982

—¡Freddie! ¿Cómo el líder de Queen, te sientes responsable del éxito...—Lo interrumpió.

—No soy el líder de Queen... Solo soy el vocalista.—Respondió sin importancia y enfadado.

Nos encontrábamos en una conferencia de prensa de la banda para hablar sobre el nuevo álbum, pero parecía más una conferencia para Freddie que otra cosa.

—¡Freddie! ¿Has dudado de tu talento?

—No... Qué estúpida pregunta.—Fumo un poco.

Entre más preguntas le hacían, más tenso se volvía el ambiente.

—Deben parar...—Comenté con preocupación, mientras cargaba al hijo de Kate. Michael, de dos años.

—Sí... Unas preguntas más y Freddie explotará.—Habló Jamie, quien cargaba a su hija Emily, de 4 años.

—Estúpidos periodistas.—Miró a Jamie.—¿De dónde sacas las fuerzas para cargar a tu hija? Ya tienes un buen rato cargándola... Él mío pesa kilos monstruosos, y ya me duelen los brazos con cargarlo 10 segundos.—Bajó a su hijo.

—¡Mamá!—Estiró sus brazos a su madre.

—¡Ay no! ¡Te acabo de bajar!

Mientras que Kate discutía con el pequeño Robert, (aclaro que Jim Beach, tiene rato con nosotras y nos ve de manera rara por nuestro extraño pero único comportamiento) y Jamie me miró sonriendo.

—¿Y tú? ¿Aún no estás lista para ésto?—Miró a su hija, luego paso su vista a Kate y Robert, (el niño ganó la batalla con su madre y ya lo estaba cargando nuevamente) y yo miré a Jim, quien se encogió de hombros y finalmente pase mi mirada a Michael.

—¡Oh vamos! No lo sé...

—Tienes un poco más de 2 años con Roger, ya deberían dar el paso... ¿No lo crees?—Kate movió sus cejas de abajo hacia arriba.

—Estas loca.—Miré a otro lado.

¿Estaré lista? ¿Estaré lista para ser madre?

El pequeño Michael, removió de su lugar, y me lastimo el pecho.

—Auch Michael, ten cuidado cariño.—Con un brazo sostenía al bebé y con la mano libre me acaricie el lugar donde tenía lastimado. Kate y Jamie me miraron con extrañeza.—No, no soy una exagerada, solo tengo mi pecho sensible, además de que crecieron dos tallas más de lo normal. Eso es todo.—Miré al frente pero...—Ay mierda...—Me puse pálida y fría al recordar algo.