Cap 11

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Capítulo 11: Confiar a ciegas

Nos encontrábamos en una llanura desierta, el suelo estaba agrietado y tenía arena negra, como la ceniza. Había estado aquí antes, con mis hermanos. Solo que estaba diferente, el edificio que recuerdo que antes estaba aquí, había desaparecido.

- ¿Por qué demonios estamos aquí? -dije dando golpes a mis muñecas.

Draco me miró preocupado.

- ¿Qué es este lugar? -dijo Malfoy tocando la arena del suelo.

- Es el mundo de donde viene Whisp, pero no entiendo por qué estamos aquí. -dije mirando a mi alrededor para buscar una respuesta. -Ahora estamos en otra dimensión.

Empecé a escarbar en la tierra, Caranthir reía.

- Te ha saboteado Whisp, ella sabía que estabas yendo a por ella -dijo el elfo sin ayudar a nada.

- No me digas -dije sarcásticamente. -No me había dado cuenta.

Cuando terminé de cavar con mis manos encontré lo que quería, un símbolo. Ese símbolo lo llevaba viendo mucho tiempo, en los lugares más insospechados. Sabía que significaba algo, pero no descubrí todavía el qué. Ese símbolo tenía relación con Whisp, eso lo tenía claro. Cogí por una manga al elfo que no hacía nada y lo puse encima de la runa.

- Sabes lo que tienes que hacer, ¿no? -dije mirándole a los ojos fijamente para ver si decía la verdad.

- Puede... -se le dibujó una sonrisa en el rostro.

- Draco, dame tu varita -dije alargando la mano hacia Malfoy.

Él caminó hacia mí y me la entregó. Apunté con ella a Caranthir.

- ¿Qué pretendes hacer con eso?

- Lo que yo quiero, ¡Imperio!

Desde ese momento estaba el elfo bajó mi control, le devolví la varita a su propietario.

- Caranthir quiero que nos lleves hacia Whisp -le ordené.

Le hice un gesto a Malfoy para que se acercase más. Tras esto Caranthir nos rodeó con un círculo de fuego, se le puso la parte esclerótica del ojo negro y empezó a recitar algo en elfo antiguo. Draco nervioso me cogió de la mano, a él no le gustaba la magia de ese tipo. Cuando terminó de hablar Caranthir, el suelo se abrió y caímos a su interior como si fuese un agujero negro.

***

Mientras tanto, Harry, Ginny, Pansy y Ron, ya estaban en el pasado, haciendo su trabajo.

- Chicos, no os mováis tanto -susurró Pansy. -Si no, nos verán.

Los cuatro estaban estrujados bajo la capa. Harry volvió a guardarse el collar de Hermione en el bolsillo, ya no lo iban a necesitar. Se encontraban en los pasillos de Hogwarts, el castillo todavía estaba intacto. Caminaron un rato porque no podían hacer nada todavía, tenían que esperar para poder intervenir en los acontecimientos. Se escondieron en los baños, donde Myrtle la llorona se hallaba.

***

Cuando terminamos de caer, nos encontramos de nuevo en la dimensión correcta. Solo que no estábamos en Inglaterra, estábamos en Suecia. ¿Cómo lo sabía si acababa de aterrizar en un lugar desconocido? Muy fácil, porque al tener todos los poderes que quiera puedo transformarme en un pu** GPS. No, es broma, me estoy quedando con vosotros. En realidad, es como si estuviese insertado un chip en el cerebro y puedo saber el lugar, la hora y el año en el que esté en ese momento. Como Caranthir estaba bajo mi control, todo iba a ser coser y cantar. Porque desde un principio sabía que él no iba a colaborar.

Misterio en Hogwarts De la trilogía de Núm. 8- Segunda parte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora