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-¿Estás bien Leah? Sin mentir- dijo Alan con seriedad antes de abrir la boca

-Estoy bien. Solo un pormenor pero quedó todo solucionado- les susurré solo para ellos

-Empezarás a estudiar nuevamente en casa y no me importa lo que digas- dijo Josh con seriedad, se notaba la furia en su mirada

-Hermanito. Tranquilo, te contaré en casa. Codigo de hermanos. Así seguiras disfrutando tus tazas de té y yo mis molletes en clase- le dije con una sonrisa tranquila

Grave error decir eso. Alan me asesinaba con la mirada

-¿Cómo porqué comes en clase?- cuestionó Alan aparentando tranquilidad

Amely y Luis miraban confusos

-Alan fue mi maestro particular hasta que entré a la preparatoria- les expliqué a mis amigos

-Alan relájate, no la dejes en vergüenza con sus amigos, en casa la regañas todo lo que quieras- dijo Alana a su hermano

Él relajó la expresión del rostro

-Ahora, ¿Porqué no discutimos a lo que venimos?- propuse

-Bueno, la clase de matemáticas está bien. Aunque el problema es que cuando le piden al maestro que vuelva a explicar lo hace muy vagamente y cómo dijo Leah, hay varios que no comprenden a la primera, aunque debo admitir que bueno, para mi que estoy acostumbrado a una enseñanza muy estricta he entendido a mitad de la explicación- comentó Josh

-La maestra de literatura que me tocó a mi en la primera hora, usa demasiados términos complejos y no explica que son por lo que los alumnos pude notar se quedan en la lela- dijo Piers

-¿Están haciendo apuntes de los maestros, cierto?- preguntó Alan

-Tengo cómo 2 libretas enteras pero si- dije riendo

-Espera, ¿Por eso es que siempre te la pasas escribiendo?- preguntó Amely sorprendida

La sonreí con inocencia. Todos asintieron

-Terminamos de comer y vamos a ver las instalaciones- dijo Alana

Y así fue lo que pasó, todos eramos muy elegantes a la forma de caminar, incluyendo Amely y Luis gracias a la clase de comportamiento en la que estuve obligada darles para que me dejaran tranquila

-Podemos hacer los cursos aquí, está grande y cabriamos a la perfección- exclamó Alan entrando al auditorio

-El problema es que no habrá donde escribir- le dije

-De hecho, escribir sobre tus piernas es doloroso y tedioso porque uno no encuentra una forma de acomodarse- le comentó Luis

Ellos dos se habían llevado de maravilla ya que Luis quería ser maestro

-A mi no me engañas. ¿Cómo te sientes?- preguntó Lupe a mi lado

-Es... no sé- le respondí, sabia que se referia a mi confrontamiento con Gael- Les contaré pero debes prometer que la plática no saldrá de mi habitación- le dije con gravedad

-Leah, sabes que nunca decimos nada- respondió ella

Nos quedamos en silencio mientras, Alan, Luis, Alana y Amely daban sus opiniones al respecto, Josh y Piers estaban algo alejados de todos

-¿Qué opinan del salón de medios visuales?- propuse acercándome al cuarteto

-De hecho... no estaría mal, ya que ahí hay sillas, hay mesas, está el proyector- dijo Luis pensativo

-Pues vamos a verlo- comentó Alana

Ellos junto con Lupe fueron los primeros en salir, detrás iban Josh y Piers

Cortejo A La Princesa - TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora