Cap. 4. ¿Quién soy?

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Ambas bajaron por el pasadizo secreto subterráneo que conducía a una maravillosa aldea bajo tierra.
Era una gran caverna, extremadamente enorme, tenía lo suficiente como para poder llevar una vida en paz y armonía alejado del bullicio de una sociedad; junto a la aldea existía un hermoso lago azul turquesa, del cual los aldeanos llevaban agua para bañarse o para su alimentación ya que era agua dulce potable.

Junto al lago estaba la aldea, está aprovechaba los muros de la caverna para comenzar la construcción y gracias a los minerales y tierras que habían en el lugar creaban una especie de cemento o adobe con el que terminaban de rellenar el lugar donde se daba la construcción.

Además no tan lejos del manantial habían corrales con muchos animales los cuales fueron traídos de otros lugares muy lejanos se y eran reproducidos y sacrificados para después con sus materiales como carne, lana, cuero,etc comer y crear materiales para su sobrevivencia.

Por otro lado; también había plantas muy bonitas en todo el lugar las cuales eran también recogidas o compradas de otro lugar y sembradas en ese lugar, donde se les brindaban todo lo necesario para que pudieran crecer bien y un día con ellas crear muchas cosas.

Eran tan maravilloso aquel lugar que Danna creyó que aquello era un sueño, se pellizco un brazo pero como en cualquier cuento o película, le dolió y comprobó que aquello no era un sueño y luego de llorar y sentir la horrible inflamación que ella misma había provocado prefirió no haberlo hecho pero se alegro al saber que aquello que estaba frente a sus ojos era verdadero.

Pronto alguien grito a lo lejos:

Gabriela: Danna, ven para acá, ¿Que haces? Ven.

Danna: volvió de su trance y al notar que ya hasta pérdida estaba corrió rápidamente con Gabriela.

Ya junto a su amiga paso a su casa, no podría creer lo arreglada y cómoda que era su casa, en el cuarto habían 10 al parecer 5 camas eran de la familia y las demás eran para los invitados; cerca habían unas sillas, mesas y utensilios de madera, cerca de una esquina había una chimenea de barro en la cual cocinaban su comida.

Después de ofrecerle de comer Danna pregunta:

Danna:Muchas gracias. ¿Díganme, aún no los conozco cuales son sus nombres?

Xxx: Hola, mi nombre es Alfredo, soy el hermano mayor.

Gabriela: bueno ya me conoces, soy Gabriela y soy la hermana de en medió. (Sonríe pícaramente)

Xxx: Hola, mi nombre es Valentín y soy el hermano menor.

Xxx: de nada, es un gusto tenerte aquí con nosotros, yo me llamo Fernanda Valentina y soy la madre.

Xxx: Que tal, yo soy Alfonso Alfredo y soy el padre.

Danna: bueno creo que Gabriela a mí ya me presento.

Gabriela: bueno si ya lo hice ( se esconde detrás de su padre)

Después de un rato de habla y socialización con la familia todos quedaron cansados y se fueron a dormir.

Así fue varios días, que Danna les ayudaba en sus labores diarias y de su siembra hasta, que de repente una noche descubrió algo super raro.

Era una noche común y corriente cuando Danna se levantó de la cama porque no podía dormir, había un poco de frío y por ende el mismo la obligo a buscar una manta, pero se dio cuenta de otra cosa y fue que al voltear a un lado suyo encontró un lobo gris escarchado de blanco y patas negras, ella pensó que aquello era un mal sueño pero al seguir volteando a todos lados se encontraría con una familia de lobos los cuales eran grises escarchados de blanco y botas negras, ella aún creía era un sueño, pero el frío la mantenía despierta y somnolienta, como no tuvo remedio se acostó cerca del lobito mayor el cual tenía el pelo más sedoso y cálido.

Al día siguiente toda la familia se levantó con sorpresa, puesto que Danna dormía en la cama del hermano mayor; todos le hecharon la culpa creyendo que hubiera hecho cosas sucias con ella, al final de que le castigaron injustamente.

Pronto Danna se levantó y pregunto por los lobos que había visto en la noche...

Ellos se miraron entre si, moviendo la cabeza hacia un costado; aparentando no saber nada.

Pero como Danna es muy lista descubrió aquello al instante y les pidió explicaciones. Pronto descubrió que aquello que había visto en realidad era cierto y que tal vez en ese lugar habían cinco lobos viviendo y nadie más se había dado cuenta; pero para sorpresa de Danna todo el mundo en esa caverna eran hombres lobos de pelaje gris escarchado con botas negras y ojos verdes.

Danna ya nisiquiera se podía dar a entender ¿quién era ella en realidad?, si todo el mundo eran hombres lobos ¿quien era ella?, ¿era la única humana en ese mundo tan rebelde?, ¿sus familiares y amigos de la aldea sangrienta eran también personas normales? ¿y que eran realmente aquellos bárbaros?

Todas esas y más preguntas se formulaban por la cabeza de Danna, al límite de desmayarse y caer al lago azul del pueblo; así quedando dormida por varios días.

Todos los lugareños le sacaron del agua y le llevaron a casa de Gabriela donde le proporcionaron medicinas y descanso para así mantenerla a salvo de su locura.

Después de dos días despertó y comenzó a preguntar a todo el mundo, pero ellos le tuvieron que detener un poco ya que Hiba muy acelerada:

Fernanda V: Espera hija, más despacio, comenzemos por el principio...

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