Angel or Devil (RE-ESCRIBIENDO)

Capitulo 2

—HimChan, ¿Cómo te sientes? —Pregunto un preocupado YongGuk, que junto a un vaso de wishky, se encontraba sentado al lado del menor.

—Sobreviviré, eso es lo importante. —Comento mientras sonreía con amplitud, manteniendo el reposo que el médico le había aconsejado.

—Por cierto, JunHong no pudo mantener lejos a JongUp, se lo importante que era que el no volviera a enfrentarse a esto. —

—No te preocupes por eso YongGuk, ya después veremos cómo arreglamos esto, por cierto, ¿Dónde está Uppie? —Cuestionó mientras alcanzaba un vaso de agua que estaba sobre su mesa de noche.

—No lo sé, DaeHyun lo vio salir después del desayuno y aun no se a reportado. —Dio otro trago a su vaso, girando el rostro a la puerta cuando esta se abrió.

—Uppie, ¿Dónde estabas? ¿Por qué no habías venido a ver a tu hyung favorito? —Cuestiono un sonriente HimChan mientras dejaba el vaso en su lugar de nuevo.

—Oh, cambiaste tu color de cabello, y veo que traes un tatuaje nuevo. —Dijo YongGuk, un poco sorprendido, mientras el menor de los tres avanzaba hasta la cama de su novio, tomando asiento al lado de este y frente a YongGuk.

—Ya me había aburrido del azul, me gusta mas de color violeta. —Dijo tranquilo, pasando sus dedos por sobre su cabello para peinar este hacia atrás. — ¿Te refieres a estos? Solo son un par de estrellas. —Comento tranquilo al tiempo que señalaba su cuello.

—JongUp, dijiste que el del brazo sería el ultimo. —Dijo un molesto HimChan, el cual había estirado su mano derecha para girar un poco el rostro del menor y así poder ver las figuras que ahora decoraban su cuello.

—No te enojes HimChan, YongGuk hyung también tiene tatuajes, incluso Zelo también los tiene. —Comento en un intento de restarle importancia a aquella situación mientras giraba su vista hacia el mayor.

—Lo siento Uppie pero a nosotros no nos metas. —YongGuk se había levantado de aquella cama, dando el ultimo trago a su vaso antes de despedirse de ambos y salir de aquella habitación.

Cuando ambos estuvieron al fin solo, el pelinegro no dudo en sujetarle por la nuca mientras unía sus labios a los del contrario, dejando que ambos liberaran todo el sube y baja de emociones que habían vivido aquella noche. JongUp le sujetaba por las mejillas, liberando todo el pánico y la desesperación que había sentido unas horas atrás mientras que algunas lagrimas traicionaban sus ojos y escapaban de estos, lagrimas las cuales HimChan se encargaba de secar mientras calmaba todos los demonios del menor.

—Perdóname por ser un idiota y preocuparte Uppie, Bang y yo nos distrajimos. —Comento Himchan al separarse de los labios ajenos, subiendo a besar su frente antes de unirla con la del contrario.

—Solo yo puedo matarte Kim HimChan. —Respondió el menor, abrazando la silueta contraria con cuidado de no lastimarle pues todo había ocurrido la noche anterior.

—Lo se Uppie, lo sé. —Mencionó antes de volver a besar los labios ajenos, haciendo que el cuerpo del menor se acomodara sobre la cama al tiempo que tiraba las sábanas y se acomodaba sobre el.

—Channie... debes descansar... —Podía sentir como los labios ajenos bajaban hasta su cuello, comenzando a besar la zona donde ahora un delgado plástico cubría los tatuajes recién hecho.

—Lo siento Uppie... pero después de casi morir anoche... no planeo detenerme ahora... —El choque de su cálido aliento sobre la sensible piel de su oído le hizo temblar, abrazándose al cuerpo de su mayor mientras un suave jadeo escapó de sus labios, HimChan sabia exactamente donde debía tocar para que el deseo del menor se hiciera presente.