Esǫᴜɪᴢᴏ ❀ [CʜᴀɴBᴀᴇᴋ]ᴬᵈᵃᵖ

fifteen

Era jueves por la tarde, ChanYeol salió de la mano de BaekHyun de aquel hospital donde le hacían los chequeos médicos al mayor. Los doctores dijeron que Chan estaba mejorando, descubrieron al fin aquella parte que daba paso a las alucinaciones del chico. El estrés eran uno de ellos y sus problemas de su infancia eran la mayoría de los factores. Y esto lo sabía sólo BaekHyun, no ChanYeol. Los médicos prefirieron decirle a Byun en vez del paciente para evitar que se alertara o intentará algo.

—Esta mejorando, hyunggie. –. Repitió el menor dando un par de caricias en la mano del mayor. Este último soltó una pequeña risa y entrelazo sus dedos con los de Baek.

—Todo es gracias a ti Baekkie. –. El pelinegro miró al menor, quien estaba sonriendo tímidamente, sintiéndose pequeño ante la mirada del mayor.

Ambos caminaron hasta el hogar de BaekHyun, donde ambos se sentaron en el sofá y se cubrieron con varias mantas y cojines para poder comenzar a ver una película la cual era de terror.

Al poco tiempo de que la película comenzará, ambos ya estaban abrazados y con miedo.

—No creí que fuera tan fuerte. –. BaekHyun suspiro.

—Yo tampoco... Aunque no fue para tanto. –. Rio un poco, ganándose una mala mirada del menor.

—¡¿Cómo qué no fue para tanto?! Casi me da un infarto, hyung.

ChanYeol rodó los ojos ante la exageración del menor para luego soltar otra risa. Byun tomó u a almohada y la lanzó en contra del alto, comenzando así lo que sería una guerra de almohadas. Luego de que casi media hora peleando, ambos estaban ordenando todo en la sala que quedó muy desordenada debido a su juego.

—Tengo hambre. –. Admitió el menor. —¿Y usted, hyung?

—No tanta. –. Dijo el mayor, aunque en realidad sí tenía. Solía mentir debido a su ansiedad social que aparecía cada que iba a casa de personas, incluso si estas personas eran cercanas a él.

—Tengo una idea. –. El más pequeño se acercó al rostro del alto y se atrevió a dejar un casto besito en su mejilla, justo donde se formaba el lindo hoyuelo que tenía Park al sonreír. Este último lo miró confundido y con una sonrisa. —Hagamos cupcakes hyunggie.

¿Ya les había dicho ChanYeol que BaekHyun era el fan número uno de los pasteles, pastelitos, bocadillos y todo tipo de cosas dulces? ¿No?

Bueno, lo era.

ChanYeol no era del todo fan, al menos no como BaekHyun, pero si le gustaba lo dulce aunque sea un poco. Aunque, claramente le gustaba mucho más ver a BaekHyun disfrutar de un bocadillo, luciendo muy bonito al comer.

Ambos pusieron las manos a la obra rápido y pronto tuvieron toda la masa –que de por sí no era difícil– completamente lista. Aunque... La mesa no corrió con la misma suerte; pues esta había terminado con mucho polvo de harina debido a que tenían que echar más harina al tazon y se les escapó.

ChanYeol se burló bastante después de eso.

—Mire, hyung. –. Llamó al mayor y cuando este giro, una parte de la mezcla había embarrado la mejilla de Chan debido a que BaekHyun tenía su dedo esperando por el rostro del mayor.

El menor rio y rápidamente se alejo del mayor, con miedo a que este quisiera vengarse. ChanYeol le lanzó una mirada amenazante y se limpio la mejilla con una camisa de BaekHyun que estaba por ahí.

—¡Hyung!

—¡Tu empezaste! –. Rio.

Así estuvieron el resto de la tarde, pasándola entre bromas, juegos tontos que sólo ellos podían entender, risas y muchos besitos en medio de cada acción. La noche había caído y decir que ChanYeol tenía las mismas energías que Baek, sería una completa mentira.