Mi Asistente Personal

Lo inesperado. Parte 1

Empeze desde cero en la empresa de mis Padres.
Cuando se retiraron yo conseguí con mucho esfuerzo mi trabajo como Directora. Estar a cargo absorbe gran parte de mi vida asi que opte por contratar a alguien.

-Acaso no puedes hacer nada bien? Estos reportes estan mal, hazlos de nuevo.

Se los aventé y estos volaron, realmente no habia un error en concreto, solo era mi forma de darle los buenos dias, Jennie era mi asistente y hacia un trabajo excelente mi excusa? Estaba molesta con ella, verla andar en minifalda y tacones me ponia mal.

Veran hace tiempo yo era una absoluta perdedora una nerd sin remedio y mi encantadora asistente fue mi crush, yo la acosaba siguiendola a todas partes, era la chica más popular del campus.

En una ocasión me beso pero estaba tan borracha con sus amigas que se le olvido.

Me le iba a declarar al graduarnos, aunque ya todos se me habian adelantado y alguien le habia dicho de mi condición, cuando me sincere ella se rio de mi, rompiendo mi corazón.

Ahora la tengo en mis manos y la hare sufrir.

-Hoy tienes que entregarme los formatos igual y como te los pedi esta claro?

-Si se los tendre a tiempo.

En el trabajo más de uno me reclamo por la forma en que la trataba, incluso mis Padres cuando me visitaron. Pero yo era su Jefa podia hacer lo que quisiera con ella, pero... por más grosera que me portara ella solo me sonreia.

Hoy me la pase mirando sus pechos aproposito cada que ella se dirijia a mi y se que ella lo notaba por su voz temblorosa.

En el almuerzo mi bulto empezaba a palpitar no tuve de otra y me encerré en mi oficina, me dolía estaba hecha piedra, desabroche mi pantalón y baje el cierre, empece a jalarmela.

Busque en mi computadora, tenia una galeria especial de Jennie y me encantaba verla en traje de porrista, yo misma la tome con mi cámara profesional.

-Dios soy una pervertida.

Deje que mi mano hiciera el trabajo estaba a nada de terminar, no escuché cuando golpearon la puerta, era ella con los papeles que le pedi.

Se acerco para darmelos y vio la pantalla sonrojada, igual lo hice y despues la vi a ella, sin parar mis movimientos, obviamente percivio como yo movia "algo" debajo del escritorio. Pero ella se quedo allí como si nada.

-Necesita que le ayude con algo mas?
-Si... no sabes tocar?
Me atrevi a decir, talvez la excitación me habia nublado los sentidos. No me contesto.

-Vete y ponle seguro a la puerta.
Mordia mis labios imaginandome su culo cuando se fue a cerrarla, pero puso el seguro y se quedo adentro conmigo.

Muy valiente no? Veamos hasta donde serás capaz de llegar Princesa.

Irritada afloje mi corbata y sin mas me pare aventando la silla de golpe, ella vio como mi polla dura revotaba, abrió sus ojos como platos por mi tamaño.

-Ven aqui.
Le señalé sosteniendo mis pantalones abiertos. Ella se acerco.

-De rodillas.
Le ordené y ella lo hizo de inmediato, mi altura hacia que su cara quedara en medio de mis piernas viendo mi miembro salido y ella otra vez no dijo nada.

Que le pasa?
La mire apoyando mis manos en mi cintura, sin querer analice su brasier de encaje dentro de esa fina blusa transparente.

Que descarada porque  viste asi?

Leyó mi mente y voluntariamente se la desabrocho para mi, deslizandola hasta sus  hombros, termino mirandome como esperando algo.

Bien Jennie tu te lo buscaste...

-Abre la boca.
Ella sumisa seguia mis ordenes.
-Más Princesa... Abrela más para que pueda entrar.
Me burlaba y con mi pulgar acaricie sus labios.

-Esto te va a gustar...
Le dije con un tono de malicia, retiré un mechón de su cabello para que disfrutara la vista y acariciando su rostro se la meti sin avisar.

La garganta de Jennie era el cielo... la misma Gloria.
La tenia como yo queria.

Gemia cuando se atragantaba conmigo dentro de ella, me incline un poco tomando su cuello apretandola levemente y no se pudiera retirar, movia mi cadera para ahogarla, acercandome una y otra vez sin compasión.

Los sonidos eran magníficos, su mirada me avisaban que necesitaba respirar, pero no le prestaba atención y enojada tome sus manos cuando quiso empujarme, las coloque en mis piernas queria sentirlas. La reacción de ella fue acariciarme dulcemente como pidiendo disculpas por eso.

Me corri y ella me chupaba con más fuerza, extrayendo cada gota.

Esta chica estaba dispuesta a complacerme.

Meti la punta de lado, mi verga empujaba su mejilla estirandola hasta salir y palmear su lindo rostro acalorado, la miraba cubierta de la saliva en mi pene.

Queria verla humillada pero la tenia aqui encantada saboreando cada parte de mi, para que negarlo ambas lo estábamos disfrutando.

Eso me frustraba, asi que me detuve ya no pude seguir y le pedi que se fuera. Acomodando la camisa de mi traje, guardando todo en mi boxer. Ni si quiera le ayude a pararse y le di la espalda esperando que se largará.

22:00 hrs.

Era tarde, sin pedirselo Jennie me prepraro un café con galletas como a mi me gustaba, asi que la ignoré intuía que queria hablar conmigo e invitarme a una cita, como cada viernes era su costumbre.

Toque mi frente cansada y miré mi reloj de pulso.

-Tu horario finalizo hace tres horas, puedes irte... Ah por cierto no tienes porque presentarte mañana estas despedida...

Se quedó inmóvil y yo seguí hablando.

-Te hare una carta de recomendación y toma. Es un cheque, considera esto un bono extra por... ya sabes tus servicios.
Hablaré con RH para lo de tu liquidación, asi que por favor retirate.

Al fin lo logré, ella se fue azotando la puerta, se veia molesta, no pude sostener su mirada.
Mierda... esta vez sentia que me pase y mi conciencia me hizo salir trás de ella.

-Espera Jennie!
Tome su mano, la alcance en el elevador.

-Lamento tratarte asi... Mira fue un error haberte contratado. Lo siento.

Busque su rostro y eso eran lagrimas? estaba llorando?
Alejo mi mano, para apretar el botón, las puertas de metal se cerraron. Subi a la terrasa y prendi un cigarro, estaba hecho jamás volveria a verla, regrese a mi oficina y me dispuse a terminar los pendientes.

Firmaba todos los documentos para irme a casa pero en ese momento me dolia la cabeza, me senti cansada. Escuche como tire algo y se estrellaba. Luego desperte desorientada en completa obscuridad.

-Donde estoy?
-Tranquila dime te duele algo? Quieres que traiga un doctor?
-Jennie? Si el cuello. Pero... Que! Porque no puedo moverme... Senti escalofrios.

Tapo mi boca con algo, mi cabeza dolia, tenia frio senti que estaba en ropa interior y asi era.

Jennie me habia drogado?
Que sucede! Me alarmé intente gritar pero no podia.
Estaba atada a una silla.