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Jimin no tiene filtro, si quiere algo lo pide. Así de fácil es para él pero yo estaba sufriendo demasiado con sus pedidos. La cosa empezó con venir a mi departamento a pasar su duelo de roptura, no me molestó en absoluto pero de a poco fue empeorando; siguiendo con que todas las mañanas quería que lo abrace y a cambio me besaba la nariz, era demasiado. A simple vista no parecíamos amigos, lo sé.

¿Por qué les cuento esto? Es para darles un pequeño contexto de mi situación actual. Estamos ebrios, muy ebrios. No lo conté antes pero el alcohol formaba un papel importante en nuestra amistad y hoy estamos muy ebrios. Acostados en mi cama con Jimin medio encima mío y yo rodeándolo con mi brazo mientras le acaricio suavemente la espalda.

-Me gusta esto -su modulación era nula pero igual le entendí

-¿Qué cosa?

-Así -dijo tomando mi mano, poniéndola en su cintura y moviendola, insitandome a que lo acaricie -Me gusta estar así contigo

-A mí también me agrada -acariciar su cintura tranquilamente podría volverse un hábito que a mí no me molestaría en absoluto

-Deberiamos hacerlo seguido -sus ojos se encontraron con los míos y me sentí desfallecer.

-¿Embriagarnos? -si no le ponía humor esto iba a salirse de control y no sabía cómo manejarlo después. Jimin rio y sus ojos se hicieron dos hermosas líneas.

-No, bobo. Esto, tu y yo así simplemente disfrutando de la vida. Tus mimos, mis besos en tu nariz y mejillas que oh por dios son tan hermosas -de repente se sentó frente mío mirándome desde arriba a los ojos. -Te lo juro Min Yoongi, podría pasarme la vida besando tus mejillas que no me cansaría nunca de hacerlo, tienen ese algo que me encanta.

-Detente -en serio, detente. No me hagas ilusiones.

-¿Por qué? -su rostro demostraba enojo pero su voz era dulce -¿Acaso no te gustan mis besitos? -no, por favor detente -¿Tengo que darte más para que te gusten?

-Basta Jimin -mi tono sonó lo suficiente serio como para que Jimin retrocediera frustrado y al instante me arrepentí.

-Lo siento, a veces me olvido que eres gay y estás cosas podrían confundirte -mierda, callate.

-No me confundes Jimin, eres mi amigo. -me acabo de auto dejar en la friendzone y me parece que quiero morirme.

-Si, amigos... -no me parece, si quiero morirme. Jimin dejo caer su cabeza en mi pecho y yo lo abrace contra mi. No tardamos mucho en quedarnos dormidos.

Cuando me desperté Jimin estaba prácticamente encima mío y tenía mucha sed, lentamente lo corrí para un costado y así poder levantarme a buscar agua. El departamento era un desastre y no sé en qué momento ocurrió, según mis recuerdos solo estábamos jugando a las cartas y tomando vodka, una vez que me hidrate comencé a acomodar todo para así poder bañarme. Había dormido con la ropa puesta y me sentía bastante incómodo.

Serví un vaso con agua y se lo deje en la mesita de luz al lado de la cama para cuando Jimin se despierte. Tome ropa limpia y me fui a bañar. Los recuerdos de las palabras de Jimin dolían, había dicho que no me confundía pero la verdad es que si lo hacía. Amaba que Jimin me besara en la nariz o en las mejillas pero al mismo tiempo me hacía sentir miserable por el simple hecho de estar enamorado de una persona tan heterosexual que claramente no va a cambiar su sexualidad por alguien que no pudo completar su carrera universitaria.

Cerré el paso del agua mientras enrollaba una toalla a mi cintura, mire mi reflejo en el espejo y por su puesto que Jimin no se iba a fijar nunca en mi, miren esa cara de bebé que tengo. Bebé destruido.

La puerta se abrió y Jimin paso sin remordimiento alguno, me miró de arriba abajo y yo me sentí sumamente incómodo ante su mirada.

-¿Qué haces? Vete, me estoy cambiando -hazte el duro, si.

-Lo siento pero tengo que orinar -el maldito sin vergüenza se dió media vuelta y se puso a orinar delante mío. No podía con tanto así que simplemente seguí con lo mío, tratando de que la toalla no se caiga mientras me ponía crema en la cara.

-Es por eso que tú piel es tan suave entonces... -Jimin hablo desde atrás y yo me voltee a mirarlo.

-Jimin...

-Dime -sonrio malditamente tierno, que alguien me golpee por favor. Ya no quiero más este sentimiento.

-Vete. -woau, a veces podía ser muy serio.

-Ya, lo siento, lo dejo solo su majestad -comenzo a caminar hacia la puerta pero antes de salir se detuvo -. Aunque deberías andar más seguido sin camiseta, me gusta tu pecho. -se mordió el maldito labio mientras miraba mi torso desnudo. Es mi fin, definitivamente es mi fin.

-Vete, Jimin. -lo siento pero si no soy de esta forma con él puedo llegar a enamorarme más lo que ya lo estoy y ya no quiero sufrir más haciéndome ideas e imaginando cosas que nunca van a pasar. Jimin se rió y cerro la puerta tras de él, dejándome solo en el baño.

Una vez en la vida [Yoonmin] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora