Una vez en la vida [Yoonmin]

3

Cuando volví al otro día al departamento Jimin no estaba, lo que me alivió en cierta manera pero también me entristeció. La noche anterior Jimin había vuelto totalmente ebrio, lo trajo Namj0on con la excusa de que ya se quería ir y con Junkook fuimos a su departamento. Creo que no tengo que entrar en detalles de lo que sucedió ahí, ya todos se imaginarán.

La tarde estuvo solitaria y bastante aburrida, solo me senté en el sofá a esperar a Jimin a que me haga compañía, solo había pasado unas horas desde que lo había visto y ya lo extrañaba, su compañía es algo que no se puede reemplazar.

Al parecer el día se me hizo sumamente aburrido porque me desperté cuando oí la puerta cerrarse, me levanté con una sonrisa porque al fin vería a Jimin, en serio lo había extrañado.

Cuando Jimin me vió me ignoro completamente y se fue derecho hacia la habitación, lo seguí para preguntarle que sucedía

—Vete Yoongi, no quiero verte ahora. —mierda, dolió

—¿Qué sucede? —el solo me ignoro mientras se metía entre las cobijas de la cama. —Jiminnie...

—Y todavía preguntas qué me sucede... Vete. —no me miraba a los ojos y eso me dolía

—No me iré hasta que me digas qué sucede —me cruce de brazos y me acerqué a la cama.

—Tu, maldito idiota —se puso de pie y me apunto con su dedo en mi pecho —, te fuiste a coger y me dejaste solo, estando ebrio. Me tuvo que traer Namjoon porque el señor estaba muy caliente como para asegurarse de que su mejor amigo llegue bien a casa.

—Jimin, de todas las veces que nos pusimos ebrios juntos jamás te lleve a casa y tú siempre volviste solo. ¿Qué sucede?

—Me —siguio apuntando me con su dedo en mi pecho —dejaste —otro toque —solo. —toque

—Entonces dime que te molesto que me haya ido, no metas la excusa de que estabas ebrio —tome su mano y la aparte de mi, sin soltarla. —y no te puedes enojar por eso, no estamos casados como para que me reclames si me voy, me lo hubieras pedido en todo caso.

—¡No! No te lo tengo que pedir —su mano se aferró en mi muñeca y yo ya no estaba entendiendo a dónde iba la discusión.

—Jomin ¿Qué sucede? —realmente no entendía qué sucedía con él, nunca se había comportado así y me estaba empezando a extrañar.

—¡No lo sé! —sus ojos se aguaron y me preocupé —Solo sé que no quiero que te vayas, ni que estés con nadie; se que suena egoísta pero la idea de ti con alguien más me hace mal aquí —apunto su pecho —No quiero.

había comenzado a llorar y ya no entendí nada de esa situación, no sabía qué hacer.

—¿Te gusto? —pregunte, no creía que fuese así pero era lo más lógico, así que me arriesgué

—No lo sé... —su llanto se intensificó y lo único que pude hacer fue limpiar sus lagrimas con mis pulgares mientras intentaba que se calme. —Solo sé que te quiero solo para mí, anoche cuando te fuiste con Jungkook me sentí tan mal que no pude parar de llorar en toda la noche. Cuando dijiste que el chico de la barra estaba bueno lo odié, nunca dices eso de mi y me puse celoso; celoso del chico de la barra, celoso de Jungkook, celoso de que no era yo a quien habías besado

—¿Me querías besar? —no podía creer lo que estaba escuchando, mi corazón golpeaba fuertemente contra mi pecho y tenía un enjambre de abejas en mi estómago.

—Si...

—¿Todavía quieres? —por favor, di que si

—Si...

Y no me basto más para unir nuestras bocas, tomándolo por la cintura suavemente.

Cortito pero necesario, nos vemos luego.
Lune