Cambiando Tu Historia

Capitulo 24: Primer arco.

Los quejidos de dolor salian por la boca de Lan Zhan, sus lagrimas estaban contenidas en sus ojos dorados como el sol, la sangre cubria sus blancas tunicas y aquellos labios estaban partidos con resequedad. El reflejo en sus ojos miraban con dolor a su alma gemela. Wei Ying estaba ahi, protegiendo a su pequeño hijo de tantas flechas.

Sus manos tan solo podian temblar al unisono del fuego, sus piernas no respondian, su corazón sintio el más grande dolor que alguna vez pudo sentir, su amado estaba sin vida...

[ Juego terminado ]

—¡WEI YING!.—Su gritó lo llevo a taparse sus oidos por si solo, la inercia y el no poder levantarse fueron sus ganas de matarse.—¡WEI YING!.

El olor sofocante de la tierra manchada de sangre lo hicieron vomitar, sus ojos de par en par se abrieron tan pronto como fue atravesado por una flecha. Sintio como una clara gota de agua fria recorria cada parte de su espalda, sus ojos bailaron admirando un nuevo dia, mientras que a su lado se mantenian dos seres que lo miraban sumamente preocupados.

—¿Un sueño?.—Preguntó en un pequeño susurro.

—Maestro, ¿Esta bien?, parece que su sueño fue muy aterrador para que este de esta forma.—Preguntó Bichen tomandole la temperatura.—¿Es por la guerra que se avecina?

—Mmn.—Respondio con un suave suspiro.—Soñe con Wei Ying.

—Deberia mantenerla calma maestro, el plan que tanto usted como su padre funcionara.—Dijo Wangji sonriendole un poco.—Wei Wuxian de igual forma estara bien.

Lan Zhan volvio a suspirar sin responder, tal vez esos sueños eran erroneos y no podian significar nada, todo era muy estresante para el y al saber que pronto se vecinaria la guerra no era muy alentador. El sistema habia informado que pronto sucederian las cosas que pasarian, pero lo unico que lo hizo molestar fue que su Wei Ying tendria que desaparecer por tres meses y eso era un sucio truco.

—Mmn, gracias.—

Arco: Inicio de guerra

Aunque todo parecia en calma todo era una minima ilusión, los ojos de todos contenian esperanzas y espectativas muy altas, sin atreverse a decir una sola palabra que conllevara "guerra", tal vez cada una de esas personas eran ingenuas ante todo esto y no sabian que el comienzo de una, arruinaria a muchas personas a morir sin piedad.

El sofocante miedo atraia a Wei Ying, pues comenzaria la guerra una donde bien, podia morir o vivir, una en donde muchos van a morir. Tal vez esa era una razón por la cual ahora tenia repentinas ganas de vomitar. El como cualquier otro humano tenia el derecho de tener miedo, y uno de sus medios era como podria estar tres meses en los tomulos funerarios.

Lan Zhan lo sabia, sus armas espirituales tambien lo sabian sin embargo, no podia quedarse quieto, no podia dejar de pensar en lo que pasaria despues del ataque a Yunmeng Jiang, sus nervios florecian como una flor de loto. Aunque todos lo miraban podrian decir que estaba más que fuerte para enfrentar lo que se venia pero la realidad era otra.

El solo tiene diecisiete años una edad en la que tuvo que madurar muy rapido, tal como Wei Wuxian lo hizo, y el peso en sus hombros era agotadora, el tenia miedo y el sistema no le daba alivio. La conferencia en Qishan Wen habia terminado y ahora se venia el ataque a Qinghe Nie. Obviamente hizo sus talismanes más fuertes, poniendo más energia tanto resentida como espiritual.

Pero ante todo ello, tenia un presentimiento. Ese mal sabor de boca que tenia no era normal, ese escalofrio que recorria por su cuerpo no era normal. Algo pasaria y seria muy malo.