Capitulo 30: Dos almas un cuerpo.

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Wei Ying se sentia terriblemente humillado al ser atado con esas cadenas, sentia su cuello muy apretado por el metal incluso sus pies tenian eso. En la parte de la novela describian claramente que Wei Wuxian estaria en una celda donde se enfrentaria a su mayor miedo.

Un perro gigante bola de pelos.

Claramente el no le temia a los perros pero esperaba que el cuerpo de Wei Wuxian no reaccionara a eso. A pesar de ser su "Reencarnación" no era el mismo.

Su orgullo era más grande. No se dejaria ver debil por nada del mundo.

Sus pasos fueron grandes, evidentemente las celdas parecian tan oscuras y tenebrosas que hasta le daba miedo de encontrarse fantasmas o espiritus que le quieran quitar su deliciosa alma.

[ Deberia preocuparse por lo que pasara joven cliente ]

"—¿Me estas retando?—"

[ Este apartado es muy importante, si no cumple con las misiones que se le dan, los puntos bajaran considerablemente ]

"—Eso ya lo se. ¿Has tenido informacion sobre el hermano Lou?—"

[ Hasta ahora no, sin embargo, posiblemente tenga planes de ayudar en los proximas misiones si usted asi lo requiere ]

Wei Ying lo sabia esto era muy importante, ¿Pero acosta de que? Su cuerpo aunque tenia una gran energia espiritual, tambien se cansaba. En la novela parecia que Wei Wuxian era poderoso con ese poder demoniaco que tenia pero el desgaste era increiblemente estupido.

—¿Haz prepadado la ultima celda para mi? Que cabelleroso.—Dijo Wei Ying totalmente divertido olvidandose de los pensamientos que tenia.

—Deberias callarte.—Amenazó Wen Chao.—Seras mucho más feliz cuando estes ahí.

Wei Ying sonrio amablemente pero en su mente ya sabia lo que habia dentro de esa maldita celda.—Joven Maestro Wen, es muy amable lo que prepara para este humilde cultivador.

Sin esperar una palabra más, sintio como lo empujaron cayendo al suelo. Wei Ying cerro un momento sus ojos para despues alzar su rostro y ver a un perro grande, muy grande la verdad. A pesar de que en su vida pasada no le temia a los perros, el cuerpo del verdadero Wei Wuxian empezó a temblar, sintio como su rostro palideció y el terror aparecio incontrolablemente.

"—¡Maldita sea! ¡No le tengo miedo a los perros!"

—¿Tienes miedo Wei Wuxian?.—Por detras de la puerta Wen Chao se burló junto a sus discipulos.—Espero que tengas un buen dia junto a mi querida mascota, ¿Podras llegar al amanecer?

Esto parecia más una escena de terror que una escena divertida. Un perro grande y pulgoso.

Wei Ying sintio que su alma se iria, tener enfrente a un perro y de ese tamaño era como ver a un dinosaurio atacando la ciudad.

En los ojos de la bestia se vio claramente su figura, sin atreverse hacer algo más dio varios pasos hacia atras, siendo detenido por la pared, pero su mirada estaba fija hacia ese moustro.

—Abran esta estupida puerta.—Pidio Wei Ying con panico, sin esperar más.—¡¡Dejenme salir!!

Wei Ying sintio temblar todo su cuerpo, sus gritos eran en vano pues su garganta ya dolia. Un fuerte golpe sintio en su estomago y en su pecho. La bestia lo habia golpeado con una de sus grandes patas como si fuera un juguete para el.

Wei Ying sintio pequeños recuerdos pasar por su mente, recuerdos de Wei Wuxian donde perros lo mordian y jugaban con su cuerpo.

—¡¡Saquenme de aqui!! ¡¡Por favor!!

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