Me habia quedado en la mesa, recordando a Maria, este mismo dia hace unos dos años era un dia importante de nosotras junto a mi padre, los recuerdos me inundaban la mente y el dolor me torturaba, pero mi cara era inexpresible.En eso un ruido fuerte empiezo escuchar, pero mi cabexa y yo no le dabamos importancia.
— ¡Hija! Contesta ese celular— La dulce voz de mi.madre me taladro la cebeza, ahora si sacandome de mis recuerdos me dijo sacandome de mis recuerdos.
— ¿Hola? — Conteste llevandome el celular al oido, algo irritada y sorprendida a la vez, habia cambiado de numero hace dos meses y solo mi mamá lo sabia.
Una voz suave y dulce salio con un:
— Hola soy Marisoll, la nueva estudiante. — ¿Nueva estudiante? ¿Que tenia que ver yo? — emm..., me dijeron que Belen Jackson seria mi guia por el colegio y me dieron este numero — Su voz sonaba tan nerviosa ahora, pero con ese toque dulce a la vez, pobre estaba perdida.
—Disculpa, si soy Belen pero no soy tu guia debe ser un error — Le respondi poniendo mi voz lo mas amable que pude y mire a mi Mamá, que su mirada me dio a entender que no era un error.
— Mamá, ¿Que fue lo que hiciste?.
Mi pregunta capaz salio mas fuerte de lo que queria que Marisoll escuche pero no me gustaba lo que mi mamá me daba a entender.
— Hija, perdón pero sino no sales de esta casa y quiero que vuelvas a socializar, ya hasta parece que no tienes vida.
La lastima que salio de ella me dio asco, no podia hablar con nadie mas de cinco minutos, no habia un porque, solo que desde los ultimos años, mejor dicho dos, no podia, porque antes tenia a Maria a mi lado, ahora nada.
— ¡¡YA CALLATE!! — Le grite y me fui a mi cuarto.
Pensaran que estoy loca, yo tambien lo pienso. Aveces me enojo demasiado con mi mamá, pero no entiendo su necesidad de que me relacione con gente, suspire, lo mas fuerte que pude, eso hacia para calmarme ultimamente.
Escuche un suspiro y mire directo al celular, oh no la chica nueva, me habia olvidado de ella.
Aclare mi garganta — Disculpa por lo de recien, si soy yo tu guia — La culpa me hizo aceptar — Te espero a las 7:50 a.m en el colegio, para mostrartelo.
—Si, genial — Solto rapidamente, ¿Porque sonaba tan dulce?.
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Odio las miradas al llegar a la universidad, llegue 10 minutos antes de lo acordado, asi que ahi estan los mismo compañeros, algunos nuevos y algunos se fueron, es entendible cada dia que pasaban adentro de la Universidad se deterioraban mas y los entendia, dan ganas de correr cuando eso pasa, pero las miradas que recibo son de pena, pena porque me veo igual que el anterior año.y porque sigo sufriendo como el anterior y esas mirsdas me dan asco.
Veo una rubiecita llegar con una enorme sonrisa, asi que adivino es la nueva y lo noto cuando se acerca a mi.
— Hola, mucho gusto ¡soy Marisoll! —
Junto a su sonrisa note unos ojos azules atrapantes, parecia una muñequita, la imaginaba algo distinta pero asi de alegre y amable.— Hola, soy Belen — Y le extendi mi mano que acepto rapidamente.
Cuando empezamos a caminar y yo a explicarle donde estaba cada clase y lugares importantes, le vi sus brazos descubiertos solo con dos puceras LGBTQ+ me parecio interesante.
Yo soy lesbiana y no siempre veia gente que le copara mi sexualidad o respetar, aunque aca en la universidad eran todos Heteros no les importaba el tema, pero aun asi me sorprendio.
Terminamos el recorrido y se me escaparon varias sonrisas, la habia pasado bien junto a ella.
— Perdón po lo de hoy — Le dije realmente apenada, no solo porque la habia estado conociendo y me habia caido bien, sino porque fue una situación horrible y mas escuchar a alguien enojado.
— No pasa nada — me miro fijo con sus ojos y una sonrisa — Peleas de madre e hija,lo entiendo.
— Nosotras no somos de pelear--le dije y era verdad, a mi Mamá no le gustaba enojarse conmigo y a mi tampoco con ella, solo que aveces y ultimamente pasaba.
— Entiendo tambien, aveces las cosas que dicen nos sacan de quisio — Solto una risita y siguio caminado.
— ¿Tenes muchas de esas peleas? - Pregunto aunque siento que fue de muy curiosa.
— Bueno, digamos que si me dice muchas cosas hirientes y yo me saco, por eso las entiendo — Noto la sinceridad no solo en su voz sino en sus ojos, cuando los recuerdos tocan tu cabeza y solo el dolor te hace hablar, no podia entender como se animarisn a lastimar a alguien tan dulce como ella.
Pero mis palabras no salen y veo a la gente llegar al salón un "Vamos" amigable sale de ella.
—Yo no voy a esta clase — le digo mientras niego su invitación.
—Entonces, adios.
Alza sus patitas y me deja un beso en la mejilla, mi sorpresa me hace quedarme parada ahi un minuto mientras ella entra con una sonrisa a su salón.
La clase estuvo buenisima, hasta participe y estaba al dia, me sorprendio mi entusiasmo mas que otra cosa y me gusto, me gusto estar asi, la verdad habia sido un buen inicio de año, era mi segundo año en la carrera y sentia que me estaba yendo mejor.
Sali del edificio y con mi mirada identifique a Marisol con un grupito de cinco personas, no pude evitar sonreir, no me sorprendia que ella ya hubiera hecho mas amistades que yo en toda mi vida, literalmente, ella se veia que conectaba con las personas y les agradaba, era notorio porque si hasta a mi me agrado y trate de negarme, los demas no iban a poder resistirse.