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La música comenzaba a irritar a Nozomi
No era que el sonido de las percusiones y el estruendo de las trompetas molestaran a Nozomi. No, lo encontró bastante refrescante en contraste con el constaste pitido de los monitores a su al rededor. Lo que la irritaba era el hecho de que no tenía idea de por qué la música flotaba atravesó de las paredes desde el exterior
-Koushiiii- se quejó la chica- ¿Porque hay música afuera?
Pacientemente, el hombre divertido respondió- No lo sé, Nozomi. Tendremos que esperar hasta el mediodía para que pueda decirte lo que hay afuera de la ventana
-¡Pero!- Nozomi fue persistente en sus esfuerzos por mantenerse negativa y molesta- ¿Pero qué pasa si la música se detiene antes del mediodía?
-No lo hará- la tranquilizo Koushi
Nozomi puso los ojos en blanco- ¿Pero estas seguro?- ella pregunto- ¿Muy seguro?
Las cosas continuaron así por un tiempo, con Nozomi actuando a propósito como un mocoso de cinco años y Koushi desviando tranquilamente todos sus intentos de molestarlo
Justo cuando Nozomi estaba segura de que iba a poder romper la compostura de Koushi, la puerta se abrió y entraron con sus almuerzos. Más importante aún, la enfermera que los sentaba todos los días también entró
Moviéndose de emoción, Nozomi lucho por mantenerse callada hasta que la enfermera se fue
Ni siquiera tuvo que decir nada para que Koushi comenzara a hablar
Dejando que la tensión de los hombros se fuera, Nozomi cerró los ojos y dejo que la voz de Koushi invadiera su mente, ahuyentando todos sus pensamientos
-Hay una banda de música estilo occidental afuera- comenzó Koushi- Solo hay integrantes masculinos, probablemente alrededor de nuestra edad. Todos marchan, pasos perfectamente coordinados ¡Probablemente puedas escucharlo si pones mucha atención!
Nozomi pensó lo que había escuchado, aunque solo fue un poco
-Los miembros de la banda visten un uniforme blanco implacable, pero todos son únicos a la hora de tocar. El baterista de cabello rubio decolorado la izquierda tiene los ojos cerrados. Está sonriendo y sus movimientos son despreocupados y salvajes, pero sigue manteniendo el ritmo. El trompetista que está cerca de la parte de atrás con el cabello negro y prolijo tiene los ojos entrecerrados. Sus movimientos son controlados y cuidadosos. Claramente está enfocado pero de una manera diferente a la del baterista
A pesar de que no podía obtener una imagen clara de los músicos, Nozomi aun podía tener una idea de lo que Koushi estaba hablando
-Oye, algo se mueve junto los arboles. Creo... si, ¡Es un gato!
