¿¡Qué es el amor!?

Capitulo 4~

La mañana siguiente.

T/n llegó a la escuela y se sentó en el suelo de la gran sala de actos escolares.

Ese día vestía de negro y ropa larga, sobre todo las mangas de su remera, quería que cubrieran sus brazos completamente.

Mientras estaba allí adentro oyó risas en la parte de afuera, volteó su rostro para ver y estaba Han junto a sus nuevos amigos, ríendo a carcajadas. Al ver esa imagen juntó sus piernas, rodeó estas con sus brazos y escondió su cara en el espacio que quedaba

Ella moría de tristeza y enojo a la vez, porque, según él no se alejaría de ella y no la dejaría sola, pero cuando mas lo necesita él está lejos de ser algo que se llama amigos.

Minutos más tarde llega Felix agitado y se acerca a ella.

-Tn!~ -corrió hacia ella y tomó sus manos.

-Hola Felix... -levantó la mirada hacia sus ojos.

-por favor déjame ver tus brazos... -la miró y acarició sus muñecas.

-no Felix... no puedo hacer eso. -Dió un suspiro.

-Tn... ¿por qué te haces daño? No sirve que lo hagas. No lo hagas más. -Se acomodó mejor ante la menor y continuó acariciando sus muñecaa, mientras de a poco subía sus caricias topándose con las heridas.

-d-duele Felix... d-duele... -sollozó y movió sus brazos para que no viera sus heridas.

-a mi me duele verte asi, no te lastimes... por favor -arremangó las mangas del buzo de la contraria dejando sus lastimaduras a la vista.

-bajó la mirada y comanzaron a caer lágrimas por sus mejillas. -¿Por qué es tan cruel ella? ¿t-tan poco valgo como para que me trate así?
-Murmuró entre llantos.

-ey, no digas eso... lo hace porque es una mala persona y no puede verte feliz, y vales... mucho más de lo que piensas. -sonrió leve, cubrió las heridas de Tn colocando su buzo y remera como antes y se sentó a su lado.

-no soy feliz... -fué lo único que pudo comentar. Era la verdad, ella no se sentía feliz, detestaba su vida, y a veces intentaba verle el lado bueno, pero solo se veía más imperfecciones.

-¿por qué dices eso? -la miró confundido.

-e-es la verdad, la novia d-de mi padre me trata muy mal, está embarazada, mi padre también me tratan mal, y mi mejor amigo me dejó. Todos se aprovechan porque piensan que soy buena.

-no te saben valorar. Tu sonrisa demuestra que eres feliz, pero cuando llegas a casa todo cambia, y todo se torna un mundo triste, en donde piensas que nadie te entiende... ¿no es asi? -Puso un mechón de cabello detrás de la oreja de la menor.

-Ella lo miró y al fin sintió como si alguien la entendiera. Asintió con la cabeza -y-yo solo intento ser feliz, pero con la actitud de ellos no se puede nada.

-no se trata si ellos son buenos o malos, se trata de sentirte bien tú haciendo lo que más te guste, no fingiendo serlo para que piensen que nada te pasa. -La abrazó de una manera cálida, y ella corespondió a los segundos despues.

-Gracias Felix... -comenzó a llorar. Él se veía muy bueno, sus palabras la hicieron sentir mejor que antes.

-no me lo agradezcas. -susurró a su oído y dió inicio a sus caricias en la cabeza y cuello de la menor, quien se encontraba sollozando en su hombro mientras ambos se abrazaban.