━━𝐒𝐀𝐔𝐃𝐀𝐃𝐄 ┊ ❝¿Qué tan sencillo podría ser cumplir una promesa de la que apenas lograban acordarse el ahora adulto club de perdedores? Pasaron 27 años y el momento había llegado, ya no podían escapar. Ahora no tenían otra opción más que luchar...
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𝅄ׅ֗✧𝆬ᜓ໋⇣;;❛MÁS QUE CUATRO PAREDES❜
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Libertad.
Era una palabra con la que Bill Denbrough solía soñar a diario, una que anhelaba desde que había encadenado sus propios pies, y la única llave que lograría liberarlo se la había entregado a la peor persona que pudo conocer en su vida, una que aunque se arrepintiera de haber conocido, también le había dado una razón más para luchar.
Ya no era el único que vivía en una jaula, y es que desde el momento de su sorpresiva y para nada esperada llegada, Amelia Denbrough Phillips también estuvo condenada al miserable destino de cumplir con el papel de la hija perfecta que su madre le dio, ¿y Bill? bueno, por muchos años fue demasiado cobarde como para atreverse a perder a otra persona que amaba; sabía que en cuanto intentará algo, Audra sería capaz de quitarle a su hija sin remordimiento alguno. Así que, simplemente aceptó jugar aquella farsa y no hacer nada por la libertad de él y de su pequeña.
Pero eso se había acabado.
— Silencio. — los murmullos dentro del tribunal se apagaron de repente en cuanto el juez habló. Parecía exagerado tanto revuelo por un simple divorcio, pero no era cualquiera; era el del gran escritor William Denbrough y la afamada actriz Audra Phillips, todos los presentes y los que no, querían saber el desenlace de uno de los más grandes escándalos en el mundo de la farándula. — Después de escuchar ambas partes y estudiar las pruebas presentadas, este juzgado está listo para dar su veredicto. — el hombre mayor intercalo su mirada en la ex-pareja, analizándolo una última vez.
