Monsta X~One Shots~

3. Hyungwon 🐢

My favorite coffee

     —Americanos y croissants, americanos y croissants —repetí en voz baja, mientras escribía la centésima orden del día en las hojas de mi libreta.

     Soplé mi flequillo en un vago intento para que este dejara de molestar en la zona de mis ojos y me encaminé hacia la cocina para dejar el pedido. Estaba bastante agotado y apenas había terminado la segunda hora de mi turno.

     "—Dos Lattes con galletas en forma de corazón" .

     Lo típico.

     "—Un vaso grande de batido de fresa con dos sorbetes" .

     Simplemente antihigiénico.

     "—Frappe junto a una rebanada de pastel de zanahoria, porque mi novia es vegetariana" .

     En ningún momento se lo pregunté.

     "Expresso con extra azúcar, maicenas, tartas, cappuccinos, etcétera."

     En fin, un montón de empalagosas combinaciones, especialmente creadas para compartir en esta tarde del catorce de febrero.

     No podría importarme menos.

     Le pedí a Minhyuk que intercambiará su puesto conmigo. Prefería estar toda la tarde sentado en el mostrador esperando a que la gente se acercara a pagar, en vez de escuchar a la parejas llamarse por apodos cursis y pasándose la responsabilidad del pedido a cada rato.

     —"Decide tú". "No bebé tu sabes lo que me gusta, decide tu". "Amor, lo que pidas esta bien para mi". —imité con burla a los novios de la última mesa —. Ya no lo soporto, déjame estar en la caja, por favor —, me gustaría negarlo, pero hasta yo me di cuenta de que le estaba, prácticamente, rogando.

     —Nop —, fue todo lo que dijo antes de ignorarme y volver a leer su revista con una pícara sonrisa.

     Idiota.

     —Hyung —imploré, apelando al supuesto cariño fraternal que me tenía.

     —No es mi culpa que por estas fechas te vuelvas un espécimen amargado y detestable —, me quedé en silencio esperando a que terminara con el mismo discurso de todos los años —, tenemos que tratarte a punta de pluma porque sino explotas, Hyungwon no puedes seguir así. Ya pasaron tres años, debes superar lo que pasó con...

     —No la nombres —murmuré con enojo, se trataba de un tema sensible para mi y él lo sabía.

     —Solo digo que no puedes cerrarte ante la posibilidad de salir con alguien otra vez; que una chica te haya roto el corazón, no significa que todas lo harán —, volteó la cabeza para verme y dejó la revista en mi mano —. Iré a limpiar mesas, pero solo por medio turno, después te tocará a ti aguantar a los felices tortolitos.

     Apenas fui capaz de murmurar un tembloroso "gracias", la reciente nostalgia logró enredar mi garganta en un sólido e indescifrable nudo, sentía que mis palabras salían entrecortadas debido al poco aire que todavía se almacenaba en mis débiles pulmones.

     En la fecha más romántica del año, en el día donde el aire huele dulce, los corazones laten deprisa y las mariposas escuchan a los enamorados jurarse amor eterno. Justo un catorce de febrero mi novia de casi cuatro años decidió terminar conmigo.