POWER || [Bts y BlackPink]

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Año 2018

Las hermanas aún estaban acostumbrándose a lo que empezaba a ser su nueva vida. Ahora tenían que pasar la mayoría de veces entrenando, ya no podían fingir tener una vida normal, ahora estaban siendo controladas por la empresa.

— ¡Atención! El entrenamiento ya está por empezar. — Una chica mayor que ellas llegó repentinamente a la sala donde se encontraban las hermanas descansando.

— ¿Entrenamiento? Pero nosotras ya no necesitamos eso. — Jennie miró con confusión a la estricta chica.

— Ja, tus habilidades no sirven si no las sabes manejar. — Aquella chica miró con burla a la pelinegra.

— Tú no sabes nada sobre nosotras. — El orgullo de Jennie había sido herido.

— Entonces muéstrame cómo es que controlas tu poder. — La chica seguía con su sonrisa burlona. — ¿Cuál es tu poder? Uno muy ridículo, estoy segura.

Jennie ya no dijo nada, en cambio, sus manos empezaron a tornarse rojas por el fuego que estaba empezando a salir.

— ¡Wow, fuego! ¿No trabajas en un circo?

— ¡Cállate! — La pelinegra se molestó por el comentario de la chica así que rápidamente aventó bolas de fuego en su dirección, nadie la detuvo ya que era obvio que no la lastimaría, solamente la quería asustar.

— ¡Ay! Casi me quemas el pelo. — Se quejó la rubia.

— Dejen de jugar y empecemos. — Interrumpió una voz que sonó por la bocina que había en la sala.

— Kim Roseanne, eres la primera. — Informó la chica mientras revisaba sus papeles. — Activen la prueba uno. — Ordenó a través de un micrófono.

En ese momento la sala se empezó a transformar, dejando a Rosé en una habitación muy extraña y a sus hermanas del lado contrario protegidas por un vidrio que las ayudaría a analizar los movimientos de la rubia.

— ¿Qué debo de hacer? — Rosé intentaba buscar una cámara en la sala, pero no había ninguna.

— Iniciando prueba uno. — Avisó una voz computarizada.  — Prueba uno: Varios objetos serán lanzados en su dirección, tendrás que detenerlos con tus rayos de luz y sin hacerte daño. La prueba termina cuando termines con todos los objetivos, o cuando los objetivos terminen contigo. — Después de eso, el mecanismo fue activado.

Rosé estaba segura que iba a pasar la prueba, toda su vida ha entrenado por lo cual parecía una situación fácil.

Primero empezaron a caer llantas las cuales fueron fáciles de destruir; los muebles de madera no le hicieron ni un rasguño; y los yunques fueron como plumas.

— ¡Prueba uno terminada! — Se escuchó decir a la voz computarizada.

— ¡Lo hiciste bien Rosé! — Lisa corrió a animar a su hermana.

— Lo hizo bien, pero estuvo fácil ya que es la primera prueba. — Interrumpió la chica encargada.

— ¡Tú! — Los ojos de Jennie se volvieron rojos.

— ¡Kim Jisoo eres la segunda! — Ignoró la chica con una sonrisa burlona. — Activen la prueba tres.

— ¿Tres? No se supone que ella es la segunda. — Pero nadie le respondió a la menor, ya que la chica simplemente alzó sus hombros sin importancia.

— Prueba tres activada. — Habló nuevamente la computadora. — Deberás de utilizar tus habilidades para salvar a los ciudadanos de prueba, si alguno es atacado perderás automáticamente. — Informó la voz.

Jisoo no tuvo tiempo de reaccionar cuando empezó a ser sacudida, la simulación fingía que había un terremoto.

La castaña movió ligeramente sus manos y con un ágil movimiento una gran pieza de metal voló a sus manos, después la simulación se detuvo y Jisoo bajó como si nada.

— ¿Pero qué has hecho? — Gritó con enojo la chica. — Rompiste la máquina ¿Eres tonta?

— Ya basta. — Jisoo inmovilizó a la chica gracias a las pertenencias de metal que usaba. — Jamás dijeron que no podía hacer eso así que cuenta.

— Como sea. — Cuando la chica fue liberada se alejó de las hermanas. — ¡Lalisa Kim eres la siguiente!

— Prueba cuatro activada. — Habló la computadora. — Señorita Kim, usted debe de proteger la bomba que está en el centro, sí uno de los robots logra tocar la bomba la prueba habrá terminado y usted perderá.

Lisa respiró pesadamente, estaba caminando hacia el centro del lugar cuando una fuerte sacudida la hizo caer.

— ¡Están atacando las instalaciones! — Avisó con pánico uno de los encargados.

— Genial. — Murmuró Jisoo con fastidio. No las habían dejado terminar.

— Creo que esta es su primera misión: Protejan la empresa. — Comenta la chica rubia mirando a las hermanas.