Primer día de Abril

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Entre alucinaciones por las pastillas que me autorecetaba y las pesadillas que me seguían. Logré huir de tí, de tu llanto inquebrantable, quería pensar que eras tú quien estaba detrás de todo mi sufrir, qué te encontraría indefensa en aquel olvidado rincón de mi mente, pero el eco de tu voz me guiaba en direcciones diferentes y en ninguna te encontraba, es tan valiente perseguirme entre mis recuerdos, pero no alcanzas a tocarme en la realidad... Mis ojos lograron abrirse, me encontraba sudando, con las manos temblorosas y el corazón agitado,sentía el calor de mi cuerpo como gotas rodando por él y el olor a humedad encerrado en mi habitación, tenía tiempo de quedarme a pensar en tí, bajo las sábanas mojadas. Pero decidí saltar de la cama para abrir las ventanas, parado frente a ellas el aire me recordaba que está era mi vida y que todo era real, qué tú ya no estabas, miré el despertador, eran las 5:40 am buena hora para comenzar el día y llegar temprano a clases, pero desde hace tiempo yo había perdido el sentido de buscarte entre nuestros compañeros y asistir a la institución.

Aún quería descansar, pues los sueños que tenía parecían una vida más agotadora que la que vivía. El sol aún no alumbraba el cielo pero ya me encontraba despierto, así que decidí meterme a bañar, hace meses que no prendía el calentador, el agua fría me parecía más reconfortante, me recordaba a las veces que corrimos bajo la lluvia con el viento congelando nuestros rostros. El jabón no lograba limpiar mis heridas y el agua caía con dureza sobre mí. Salí del baño y justo frente a mi estaba yo, con la cara limpia y las gotas del cabello cayendo sobre mis pies, el espejo seguía intacto, aunque recordaba haberlo roto, me dispuse a cambiarme, buscando el uniforme dentro del armario, al abrir la puerta tu moño azul hizo presencia ante mis ojos, y no pude explicarme que hacía ahí. No le tome importancia y lo escondí bajo la cama.
Salí del cuarto y bajé, tratando de no hacer ruido, a preparar mi desayuno pues mi familia solía despertarse cuando ya me había ido. Mamá de vez en cuando se despertaba en las mañanas a desayunar conmigo pero eran más los días en los que estaba solo.
Salí con prisa sosteniendo las llaves para abrir el portón de afuera y dejarlas colgando. Subí al autobús escolar y me senté hasta el fondo, desde ese ángulo me permitía observar quienes subían, nunca esperé encontrarte en él, pues tú ruta era diferente a la mía, me sentía agotado y recargando la cabeza en el asiento, caí dormido...

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⏰ Última actualización: Dec 04, 2021 ⏰

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