Cool kids [sk8 the infinity] (Renga)

Niñeros

La madre de Langa y Reki eran muy amigas pero MUY MUY AMIGAS. Y tenía sentido sus hijos eran literalmente pareja y estaban todo el tiempo junto así que en ese rato en la que las dos madre estaban solas hablaban de muchas cosa tanto de sus hijos y de la vida. Tenían cierta química que hacía que se rieran juntas y que entendieran sus bromas de señoras que sus hijos no entendían para nada. 

Entonces ¿que pasa cuando las dos señoras están desocupadas un viernes por la tarde y quieren salir a algún restaurante? Exacto dejan a sus hijos en la casa de Reki para que cuiden a sus hermanas menores en lo que no están. Serían niñeros por un día y no podía ser tan difícil. Reki siempre cuidaba a sus hermanas pero está vez era diferente esta vez estaba su novio Langa del que tanto hablaba. El Langa con el que sus hermanas lo molestaban haciendo comentarios vergonzoso sobre lo que decía del canadienses cuando no estaba cerca,como que su cabello era tan sedoso o como con solo una mirada de esos hermosos ojos azules se derrite.

Ahora solo estaba esperando a que la señora Hasegawa y su hijo cruzaran la puerta de enfrente, en cualquier segundo seria ya que veía su madre arreglándose como no lo hacía en años, se puso por fin unos jeans, una camisa de vestir bonita, se soltó el cabello rojo y se puso una fina capa de maquillaje todo en el baño de la casa. hace muchos años que no tenía amigas ya que después de todo el problema con el divorcio con su ex marido el trabajo extra la había agotado, trabajar y trabajar turnos extras por poder darle una buena vida a sus hijos, luego estaba la casa de la cual era responsable de cuidar y también sus hermosos hijos que sin importar que tan cansada estuviera tenía tiempo para jugar con ellas o hablara con su hijo mayor que siempre intentaba ayudarla económicamente con algunos trabajos en verano o en los fines de semana.

Conocer a la madre de Langa le había alegrado un poco la vida era su amiga y en verdad quería caerle bien así que la mayoría del tiempo sin importar que tantos turnos de noche tuviera que tomar en el hospital lo hacía para poder tener un día libre el viernes, los restaurantes eran más o menos una tradición antes en su familia solían ir a alguna plaza cerca y comer pero luego cuando los pagos no eran tan buenos compraban comida que se calentara en microondas, papas y helado y se sentaban enfrente del televisor a pasar la tarde así que quería verse bien para un restaurante que por su nombre en italiano sonaba elegante.pero tampoco quería ser tan formal quería mas que nada verse casual o normal pero con estilo. llamó a su hijo mayor al baño para que la ayudara a guardar las cosas que estaban por todo el lavabo mientras intentaba delinear el ojo derecho.

- recuerda no le abran a nadie, no dejen que las niñas se duerman muy noche y nada de dulces después de las 10 ¡ahg! ¡¿desde cuando es tan difícil?! - se quejó la señora kyan mientras volvía a limpiar su ojo con una toallita de bebe.

- te ayudo mamá - Reki sentó a su madre en la tapa del escusado y tomó su rostro para delinear el ojo que tanto le estaba causando problemas, luego de unos segundos Reki dijo un pequeño "listo" y le acercó un espejo de mano para que lo viera.

- hay Reki que sería de mi sin ti - dijo su mamá dejándole un beso en la mejilla a su hijo.

Ambos salieron del baño y vieron a las pequeñas kyan correr por la sala con algunas figuras en las manos y una de esas era la edición especial de Reki.

- ¡hey! - Reki corrió tras la pequeñas Nanaka y Chihiro que jugaban a pasarse como pelota la figura como si nada - ¡vamos niñas! ¡¿saben cuánto cuesta eso?!.

Las niñas corrían mientras gritaban y reían huyendo de su hermano hasta que la figura salió volando y a nada de estamparse en el suelo, Reki corrió y se aventó al suelo solo para evitar que se rompiera en millones de pedacitos y el timbre sonó y su madre abrió la puerta y ahí estaba los Hasegawa y Reki estaba en el suelo con sus hermanas haciéndole cosquillas y una figura en sus manos. Langa solo sonrió al verlo y Reki supo que ya estaba rojo por las risas de sus hermanas.