"Y después, cuando salimos a ver su lámpara acabada desde el camino, dije que me gustaba el brillo de su luz a través del rostro que parpadeaba oscuridad".
Siento como los pasos de mi mamá se intensifican, hasta que escucho como abre mi puerta cuidadosamente, "buenos días hija, levántate. -dice con una voz dulce, mientras encendía la luz.
-aagghh maamaaaá -dije mientras me tapaba la cara con las frías sábanas.
-ya levántate, no te voy a esperar todo el día, además nosotros, tenemos un tema pendiente. -dejo la puerta junta y se fue.
*Tema pendiente, que mierda hice ahora, seguro se enteró de que fui yo quien rompió su taza de café*
me puse sostén y baje cuidadosamente, aunque bastante nerviosa, mi mamá me estaba esperando junto con papá en el sofá.
-que pasa¿ -dije mientras me sentaba, se me hacía un nudo en el estómago y garganta.
-nada muy importante. -dijo mi papá aclarando la garganta.
-como que nada importante?? -dijo frunciendo el ceño.
-bueno, tu mamá y yo, lo pensamos bien, y nos mudaremos a un pueblucho, a las afueras de Orlando, tu mamá se puso en contacto con una ex compañera de la escuela, nos consiguió una casa cerca de la suya y nos mudaremos allá, no entiendo mucho para que pero- le interrumpe mi madre.
-no tienes nada que entender, solo nos iremos allá, para despejar nos, pero no es temporal, pero tampoco permanente
-mamá, no te entiendo es permanente o no?
-no, no lo se, pero al menos hasta que termines tus estudios, nos quedaremos allá.
-bueno. Nos iremos a una granja, llena de estiércol y hormigas. -dije asqueada, odiaba los insectos.
-ve a desayunar, mejor, así despejas tu mente -dijo mi papá imitando a mamá, haciendo que ambos soltaramos una pequeña carcajada.
-t/n -dijo mi mamá
-que quieres ahora? que me ponga a hablar como granjera?
-no. Te iba a decir que hay unos chicos como de tu edad allá, son nuestros vecinos, Timothée y Bill Chalamet, son los hijos de una vieja amiga, creí que tal vez, al fin tendrías una pareja, no? o estás considerando ser, ya sabes, lesbiana?
ser lesbiana no estaría nada de mal, no me miran los hombres, sería una buena oportunidad*
-no mamá, desgraciadamente, no lo soy.
-entonces? -dijo mi mamá altaneramente.
-no creas que tendré hijos a los 16, como tú
-dejalo, hazte el desayuno, tu papá y yo iremos a ver, una cosa de la matrícula de tu nueva escuela, no nos esperes para el almuerzo, nos quedaremos en una posada -dijo señalando el reloj, ya que eran como las 12 del día.
Ambos se fueron en una 4x4, dios, como amaba ese auto.
Desayuné y rápidamente me fui a una tienda de libros cercana, si nos íbamos a ir a un lugar en donde no hay internet, entonces tengo que tener algo que leer.
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