Tu, Yo y el amanecer...(Izuku X Uraraka)

Capítulo 5: Feas experiencias...

Antes que nada, quiero pedir disculpas por lo mucho que me tarde en subir episodio nuevo, en mi perfil ya explique el porque, pero bueno aquí estamos, también quiero decirles que desde ahora las historias tendrán una pequeña intro, que pueden ver o no si gustan.

Sin mas que agregar, empecemos!!!

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Aun era temprano, bastante para algunos, pero no para nuestra querida parejita de te verde, la cual dormía plácidamente, pero gracias a una alarma que no dejaba de sonar; poco a poco el peliverde se levantó y apago la alarma, se frotaba la cara con bastante cansancio, estaba apunto de volver a acostarse, pero al voltear, pudo observar a la castaña, la cual también estaba despertando, sin nada de ropa; como si de un truco de magia o algún hechizo, el sueño del chico desapareció para ahora ser un manojo de nervios que se tapo con la sabana que tenía en frente.

Izuku: -Uraraka-san!- dijo el chico volteando para otro lado.

Uraraka: -Que pasa De...- dijo pero dejo de hablar cuando se dio cuanta de lo que estaba pasando. -Ah! Que fue lo que pasó!?-

Ambos volteaban a ver hacia otro lado, pero poco a poco regresaron su mirada hacia los ojos del otro, una pequeña sonrisa boba se les hizo, y el peliverde decidió ser el primero en hablar.

Izuku: -Ya recuerdo porque estamos así jeje...- decía el chico algo nervioso.

Uraraka: -Si...ayer fue mágico De...Izuku...- dijo la chica con una sonrisa, haciendo que el chico le contestara con otra.

Izuku: -Gracias Ochako.-

Uraraka: -Gracias a ti Izuku, si tu no hubieras venido a mi rescate, nunca nos hubiéramos dicho nuestras verdaderos sentimientos; eres todo un héroe...ere mi héroe!- dijo la chica feliz.

Ambos se admiraron por un segundo y se abrazaron, nos les importaba el contacto con sus cuerpos desnudos, lo único que les importaba, era que estaban juntos como una pareja, que ese sentimiento que los carcomía por dentro ya no era un estorbo o algo por el estilo, ahora era una motivación; ambos se recostaron aun viéndose a los ojos, Izuku jugaba con uno de los mundialmente reconocidos mechones de cabellos de la castaña, y ella hacia pequeños círculos en las famosas pecas del muchacho.

Izuku: -Ochako, quieres ir a caminar o estas cansada...-

Uraraka: -Si te soy honesta, hoy me gustaría dormir un poco mas jeje, es que se podría decirse...que pues...me duele la entrepierna jeje...- decía la chica algo avergonzada.

Izuku: -La verdad es que yo también estoy cansado...y me duele el pene...- dijo eso algo seco, los dos se miraron serios y de un momento a otro empezaron a reír a carcajadas, no se esperaban aquella respuesta.

Uraraka: -Jaja, esta bien, que te parece si en ves de nosotros ir a despertar al amanecer, él nos despierta hoy...-

Izuku: -Me parece perfecto Ochako.- dijo para después darle un tierno beso en los labios y juntar sus frentes y así regresar a un profundo sueño colectivo.

De la nada, el pecoso abre los ojos, ve que esta en un lugar oscuro, apenas y se ve, ve que la mayor parte de su cuerpo esta cubierto y solo sus manos y media parte de su cabeza este normal; en eso dos siluetas se le aparecen, siluetas que recuerda alguna vez a ver visto.