El amor del Sultán

Capitulo 6

El sultán vio los ojos de su hijo y sintió el dolor que le causaba saber que su madre había actuado así y supo que Mustafá no sabía nada del asunto, puso su mano en el hombro del joven "yo no necesito mas explicaciones, la carta lo dice claro, sabes cuál es el castigo. Sin embargo por ser tu madre el único castigo será el destierro y no solo de mi palacio, tendrá que irse de Manisa y no volverá a verte. Esta será la última cosa que se le perdonara" miro a Mahidevran y continuo "Si algo le pasa a mi familia y tu nombre sale a relucir de nuevo sabes lo que pasara, es la última vez que te perdono. Despídete de tu hijo regresaras a Manisa por la mañana para recoger tus cosas y los guardias te llevaran a Bursa" salió de la habitación dejándolos solos para que hablaran detrás de él salió el gran visir y Bali Bey.

Una vez solos Mahidevran trato de acercarse a Mustafá pero este no se lo permitió.

"Mustafá, bien sabes que tarde o temprano debíamos de deshacernos de Hürrem" dijo Mahidevran con su tono de angustia

"Tal vez madre, pero lo haríamos de la manera correcta, demostrando todo lo malo que ha hecho no asesinándola para que la gente nos vea como los enemigos y a ella como una mártir" comento él mientras daba vueltas en el cuarto

"Hijo, que haremos ahora" dijo mientras lo miraba fijamente

"Nada, aceptaras tu castigo al igual que yo, lo peor es que ella me lo dijo una vez, serias capaz de todo y no le creí, estabas a punto de matar a mi hermano por una absurda guerra entre ustedes dos" dijo mientras le daba la espalda

"Hijo todo lo que hago es por nosotros" se abalanzo hacia él y lo abrazo por la espalda

"Ya no importa, rompiste mi corazón y mi confianza" dijo mientras se separaba de ella y se disponía a salir

"Mustafá por favor" grito mientras lo veía partir, con lagrimas en los ojos espero al guardia que la llevo a su habitación y le pidió que se quedara ahí.

Mustafá por primera vez vio lo que los demás veían en su madre, el ansia de poder y la disposición de hacer lo que sea así fuera la muerte de alguien inocente. Su corazón se partía por que era incapaz de odiarla, al final de cuentas ella era su madre.

El sultán estuvo con él al día siguiente, la veían desde la terraza. Los hijos de Hürrem la veían desde lejos con la cabeza en alto, se habían enterado de la carta y ahora más que nunca la odiaban al menos Mihrimah y Mehmet quienes comprendían mejor las cosas.

Gülfen la miraba de lejos, era como lo que había pasado con Hatice. Sabía que estaba en contra de Hürrem y no se metía en sus planes y tampoco en sus peleas a pesar de lo que hacían siempre eran sus amigas pero Mahidevran había ido más lejos, se había metido con la dinastía. Había estado a punto de derramar sangre inocente y eso era algo que ni ella podía tolerar, al ir a Bursa ella pensaría que sería un privilegio porque ahí encontraría a Ibrahim y Hatice, pero si ellos se enteraban de lo que quiso hacer seria un castigo por qué lejos de comprensión encontraría odio hacia ella y soledad.

Subió a su carruaje y miro por última vez aquel palacio y a su hermoso príncipe, nunca hubiese imaginado que su historia acabaría así...

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Palacio Extranjero

Ya habían pasado tres meses desde que Hürrem había ingresado a ese palacio y aun no despertaba, su vientre crecía aunque no lo suficiente por la falta de nutrientes, eso le preocupaba a Eleonor y a la doctora, de seguir así el bebe jamás llegaría al mundo y podrían perder a la sultana.

Eleonor era cristiana así que le rezaba a Dios que ella despertara pronto, esa misma tarde Hürrem despertó, estaba tranquila, se levanto de la cama y miro su vientre un poco crecido, miro a la joven que estaba con ella quien le sonrió e inmediatamente le indico a uno de los guardias que fuera a avisarle a la princesa.