Capitulo 5

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Estábamos los tres sentados en la mesa, en el centro estaba el padre de Milton, a la derecha Milton y a la izquierda yo.

- Parece comida francesa como sí la hubieran comprado-  comente.

- Acaba de llegar el delivery - dijo chistoso - Pero prefiero la comida de tú mamá. Papá la mamá de Eva cocina muy rico -

- ¿Tú sabes cocinar? - pregunto serio el señor.

Puedo poner papás fritas en mis pechos y puedes comer ahí. Malditos pensamientos que no puedo controlar.

- Se cocinar pasta - mentí.

- ¿Enserio?. Bueno cualquier día de estos puedes venir acá y cocinar, ovbio que yo te ayudo - me dijo Milton emocionado.

- Pues está bien, lo hacemos el martes que viene - dije confiada.

- Ok - empezó a sonar mi teléfono. Me pare y fue hacia donde estaba mi mochila, era mi madre.

- Hola mamá - contesté.

- ¿Estás bien? ¿Ya estás por llegar? -

- Sí estoy bien, ahorita estoy cenando y luego voy a la casa -

- Tus tías acaban de llegar con tus primas -

- Diles que me fui de viaje. Regresaré después de mi cumpleaños - mis tías por más que sean mi familia cuando estaban en la casa lo unico que hablaban era de sus hijas y las inteligentes que son, y de paso me comparaban con ellas, lo que no está mal pero me hacía sentir menos.

- ¿Dónde te quedarás a dormír? -

- La casa de Ámbar - contesté.

- Les dire que fuiste de viaje por tu cumpleaños y regresaras el domingo en la mañana. Cuídate por favor. ¿Con que te vas a cambiar? No tienes plata. -
- Mejor regreso a la casa - dije triste.

- Puedes quedarte aca - dijo Milton y voltie a verlo - Hay muchos cuartos, puedo ir a recoger tu ropa a tu casa en la mañana - miré a su padre quien parecía algo asombrado.

- Por mí no hay problema - dijo, y subió las escaleras, tan solo verlo ya me moja, es un viejo pero dios que viejo tan bueno es, es tan sexy podría hacer todo lo que me pida por placer.

- Gracias - les dije y le expliqué a mi mamá que me quedaría aquí.

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Entre a uno de los cuartos, era hermoso, la cama se veía gigante, era parecido al cuarto de Milton pero más simple.
Me tiré a la cama y rebote un poco.

- Pareces una niña rebotando - dijo Milton.

- Tú un aburrido - le tire una de las 10 almohadas que había en la cara.

- O no no no, no sabes lo que acabas de empezar - agarro la almohada y me la tiro con fuerza en la cara.
Le tiré las otras almohadas pero las esquivo, subió a la cama y me empezo a pegar con la almohada mientras yo me cubría el rostro.

- ¡Me rindo- dije - La paz Milton.

- Jajajaja muy tarde - se burlo hasta que con mí pie empuje sus tobillos y se callo de la cama.
Todo se puso en el silencio, abrí los ojos y el estaba ahí mirándome serio, su padre estaba en la puerta miéntras Milton se quedó callado, contenidose la risa.

- ¿Pasa algo? - pregunto Milton.

- Iba ir a la sala, porque se me olvido mi celular, pero como escuche ruidos raros quise saber que pasaba - dijo. Joder si voz, su voz me erizaba.
Se fue y solo nos quedamos los dos en el salón.

- Bueno ya me voy a dormir - Milton se fue hacía su cuarto y yo me quede tirada en la cama.
Me quede con el polo mediano, y quite el buzo. Me tape como un tamal. Deje cargando mi celular en la.mesa de noche, no había nada que leer, nada interesante que ver.
Fuí hacia la ventana, tenía una bella vista admire el paisaje.
¿Que se sentirá tener sexo ahí en la nada?.

Mañana era mi cumpleaños, más bien ya es mi cumpleaños tan solo que es de madrugada.
No podía evitar sentirme triste... un día cuando era pequeña me desperté por agua, pero escuché a mis tías hablar con mi madre.

- Deberías ponerla en un colegio de paga, así tal vez mejore sus calificaciones -

- Un colegio de paga no hara la diferencia, hay que ponerle mano dura a esa niña n- comento otra tía.

- Mi hija está bien con sus calificaciones, no son malas - me defendió mi mamá.

- Melissa a su edad te traía puras diplomas y los profesores te felicitaban siempre, en cambio María es una niña distraída sus calificaciones son las mínimas para aprobar -

- ¿Qué ganas de comparar a mis hijas tienen? - mi madre sonaba molesta.

- Te estamos aconsejando, no te enojes -

- ¿Qué tal sí comparamos a sus hijas? ¿Les gustaría?. Yo nunca lo hago así que no quiero que lo hagan con mis hijas -

- No se te puede decir nada -

Luego en otra ocasión escuché como hablaban que mi padre, decían "Deberías buscar a ese hombre que te abondono desde el embarazo de María"
Esa frase se me quedo en mi mente, me sentí me siento cualpable de que mi padre haya dejado a mamá, si tal vez no hubiera nacido, ellos estarían felices juntos y con Melissa.

Mejor me duermo.
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La música sonaba fuerte, los cuerpos se movían al ritmo de la musica mientras estaban juntos los unos a los otros, podia verlo todo, estába buscando a alguien, no sabía quién era pero me movía en busca de alguien.

- Te encontré - era la voz que me erizaba y quemaba, el papá de mi amigo.
Sus brazos grandes rodeaban mi cintura. Sentía su paquete en mi espalada baja.

Esto no está bien - mentí, puede que no esté bien pero se sentía muy bien.

- ¿Cuándo te importo lo que está bien? - hablo cerca a mi oido.

- Mnnn - gemí, quería sentirlo.

- Despierta floja - Milton estaba a un lado de la cama, con un short suelto y polo.

- Es temprano, 5 minutos más - me queje.

- Son las 11 de la mañana, ya fuí a tu casa a recoger algo de ropa - tenia una mochila de ropa en la mano y la dejo en la cama - Me mando dinero - dejo billetes en un lado -

- Ok - me envolví en la cama -

- Ya párate vaga - me quito las sábanas y yo le dí la espalda.

- Déjame dormir, ya me arruinaste el sueño -

- ¿Interrumpo? - Era su maldita voz, joder.

- Tápate - dijo Milton y me volvió a hechar la frazada, joder solo estaba con el polo que me dió, seguro vieron mis nalgas. Tierra tragame. Me senté en la cama y acomode mi cabello.

- Buenos días señor - lo salude.

- Ya van a servir el almuerzo ¿Nos vas a acompañar o seguirá durmiendo? - pregunto serio, que vergüenza.

- Ya los acompaño - me miro fijamente, como si quisiera que baje la mirada, pero la mantuve por más que me sentía nerviosa.

- Papá hay que dejar que se cambie - hablo Milton y salió por la puerta.

Estaba sola, haci que me puse mi ropa ya seca, me lave la cara, pero estaba hinchada, me hice un moño y baje.

- Ten - me entrego Milton, una caja mediana envuelta en papel verde pastel - Felíz cumpleaños Eva - se acerco ha abrazarme.

- Jajajaja, ay no pensé que me regalarias algo, sí recién nos conocemos - dije, el se acerco a mi oreja de forma tierna.

- Eres mi unica amistad hasta ahora, no lo olvidaría -

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Jajaja lo siento estaba muy estresada, éstoy en clase y éstoy haciendo esto (escribir).

En la tarde o noche subo otro cap

Diario de una inocente lectora +21Donde viven las historias. Descúbrelo ahora