Capítulo 1

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"¡Ash, qué asqueroso infierno!"
Esta es la expresión que desea mostrar mi cara en este mismo instante, mis ojos quieren cerrarse al ver mi nueva escuela. Esto es un suburbio, me gusta más mi escuela en América. Entro renegada a este sitio tan desagradable. Apuesto a que los estudiantes no son ni la mitad de divertidos y locos que mis antiguos compañeros de clase allá en EEUU. Saco un cigarrillo del bolsillo de mi mochila, lo prendo y empiezo a fumarlo. Continúo mi camino a clases disfrutando de mi cigarro hasta que se acerca alguien y me agarra del brazo tirando de mi hasta ubicarme en el interior de un salón próximo a mi. - ¡No se permite fumar en esta escuela! ¡Si quieres hacerlo, vete a una esquina o al techo, lejos de la vista de todos! - me dice susurrándome al oído un chico alto, trigueño, de ojos negros y profundos como la noche,labios parejos y rosados cual flor de cerezo y de buena figura. - ¿ Ya has terminado con el discurso? - pregunté con mi compañero fiel, el sarcasmo.
-No. ¿Eres nueva?
-Si, ¿por qué, te preocupa algo?
-¡No, para nada, solo tenía curiosidad!- dice con una sonrisa pícara en su rostro y colocando su mano en mi mejilla
-¡La curiosidad mató al gato! - le sigo la corriente acercándome más a sus labios
-¡Si, pero murió sabiendo! - Intenta acortar los casi ningún centímetros que le restaban a nuestras bocas para rozarce. Le di vuelta a mi cabeza evitando a toda costa un beso de un desconocido el primer día de clases y mirando el suelo sonreí de manera satisfactoria.
-¡Disculpe señor gato, necesito regresar a mi rutina! - le doy la espalda y me marcho. Salgo del salón misterioso y voy hasta mi clase. Las clases aún no empiezan, así que salgo y cerca de los baños, en unas antiguas escaleras me siento a fumar tranquila. De la nada, me encuentro observando el suelo desgastado y unos pies impiden mi observación, levanto la mirada y me encuentro con otro chico, este es rubio, de buen parecido, también alto y también en forma, no como los americanos, pero en forma. - ¿Qué quieres? - Le pregunto sin mirarlo a los ojos.
- ¿Qué te muevas de sitio? - se agacha y levanta mi mentón
-¿Por qué debería, acaso este sitio no es público? - Le quito su mano de mi cara de la manera más brusca posible
-¡Digamos que no lo es, así que quítate, no quiero lastimar a una chica tan bonita como tú! - Se cruza de brazos y me mira fijamente.
- Si tanto deseas sentarte aquí. - me levanto, arreglo el tachón de mi saya, aspiro por última vez mi cigarrillo y le escupo el humo en la cara al chico que interrumpió mi momento de relajación - ¡ Ah, otra cosita. Dudo que tengas los coj@nes necesarios para hacerme daño! - le susurré sonriendo victoriosa.
Me dirijo nuevamente al salón de mi clase, entro y minutos después entra el profesor. - Queridos estudiantes, tenemos el honor de recibir a una estudiante transferida desde los Estados Unidos, por favor, señorita ¿sería tan amable de venir a presentarse con sus compañeros?. Me levanto de mi puesto al final del aula y me ubico al lado del profe. - Me llamo ___ Smith, pero para todos ustedes soy ___ Min. Ya saben de donde soy y me gustaría que me dejara en paz mientras estoy aquí. - Les explico con una sarcástica sonrisa en mi boca. El profesor después de escuchar mis palabras me miró con desprecio y dudas pero en realidad no me importa. Me vuelvo a mí silla y empiezo mis estudios. En el recreo saco mi celular, corro mi asiento un poco hacia atrás y subo mis pies a la mesa.
-¡¿Pero qué tenemos aquí?! ¡Es la gatita! - me dice alguien que creo saber quien es
-¿Qué quieres? - sin levantar la vista del celular
-¡Aún no me creo que estés en mi clase! - se sienta sobre la mesa al lado de la mía
- ¿Te pregunté qué demonios quieres? - esta vez alcé un poco el tono de mi voz.
-¡Tranquila muñeca, no quiero nada, solo mirarte por un rato!
-¡Desaparece de mi vista antes de que te rompa tu preciosa cara! - continúo sin siquiera mirarlo a los ojos
-¿Con qué agresiva? ¡Me gusta eso! ¡Bien, me voy si te molesta mi presencia! - se levanta y se da la vuelta.
-¡Al menos no es tan estúpido, se dió cuenta de que roba mi oxígeno! - dije en voz alta.
-¿Qué acabas de decir? - se volvió enojado.
-¡Nada que te interese, solo hablaba con mi yo interior! - Sonreí para luego levantarme y tomar un sorbo de soda que le quité a una chica que observaba todo. Bebí un buche y volví a poner la lata en las manos de la tipa.
-¿Con qué tu yo interior? - mueve su cuello con intensiones de estrallarlo, se acerca a mi y me aprieta fuerte por la barbilla. - ¡Mira gatita callejera, te advierto q cuides tus palabras conmigo, no querrás salir herida! - me suelta, sobo mis mejillas y le sueno una cachetada. - ¡Gata callejera tu madre, la advertencia te la voy a hacer yo, no me molestes porque te mato asqueroso repugnante, no conoces a las americanas y menos a mi. Te aseguro que no te gustaría verme "Aggressive"!- vuelvo a sentarme donde lo hacía.

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Holis. Pues este es mi primer fanfic, quice hacerlo con estos chicos porque en verdad los amo. No se si les guste, se permiten recomendaciones, osea, lo que les gustaría que pasara. Me esfuerzo mucho escribiendola y aunque no se cuantas personas vayan a leerlo, espero que disfruten. No se cuando pueda actualizar ya que en mi país el Internet no es como en otros pero prometo actualizar en cuanto pueda y quizás hasta publique varios capítulos el mismo día.
Comenten y besos para todos 😘
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Más allá del deseo {Tae, Jungkook, Daniel y Tú} +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora