♡ Mary ♡

19 5 3
                                    

Como toda buena historia, esta inicia con una protagonista, una chiquilla traviesa que adoraba leer y escribir historias, su nombre era Mary tenía el cabello largo y rizado de un color rojizo que asemejaba al fuego casi extinto y unos ojos tan verdes como las selvas tropicales.  Ella vivía en un pequeño pueblo con sus padres, según cualquier vecino ellos eran una hermosa familia, pero el dicho “Nadie conoce las goteras de las casas ajenas”  nunca fue más acertado.

     La Sra. Marilyn Johnson una borracha sin remedio para nada interesada en la educación o el bienestar de su hija, con ataques psicóticos productos del mismo alcohol y del estrés producido por su marido mujeriego y ausente; El Sr. Tom Johnson apostador compulsivo  un don juan sin remedio y de nuevo un padre ausente, con su traje de seda azul, su cabello peinado hacia un lado y su sonrisa de rompecorazones engañaría hasta a la abuela más honesta en fin una disfuncional familia. Pero en ella creció Mary a la edad de los 8 años ella empezó  a encargarse sola de su hogar. De las comidas, de los quehaceres,  de las cuentas y deudas de sus padres y de la tienda de dulces heredada de su difunta abuela a su madre.

   Una tarde ella le hizo una pregunta a su madre que se encontraba en su sofá viendo  la televisión justó antes de quedarse dormida y esa pregunta cambio el rumbo de la historia como la conocemos hoy en día.
-¿Mama, estas despierta?
-Si…
-¿el tiempo siempre esta solo?
-No lo sé, que pregunta más rara ¿y eso que carajos quiere decir?
-Es solo que estuve pensando y me di cuenta que siempre dices que debemos llegar a tiempo y cuando llegamos el nunca esta ¿será que a él nadie lo invita? no debe tener amigos que lo inviten a ningún lugar  pero ¿por qué las personas lo cuentan si él no está? ¿Por qué lo pierden si  nunca lo tuvieron? ¿Por qué le piden que les cure las heridas si él no es doctor? ¿Por qué se quejan de que se les escapa de las manos si nunca quisieron ayudarlo? Es injusto que todos se aprovechen de él y lo traten para sí mismos como le conviene.
(Bueno eso fue más que una sola pregunta pero ustedes entienden)
Cuando termino de hablar Mary se dio cuenta que su madre ya estaba ebria y dormida, no la había escuchado así que apago el televisor, la arropo con mantas y se fue a su habitación, acostándose así en la cama quedando con la incógnita más  grande de su vida ¿Por qué el tiempo no tiene amigos?

       Mary siguió pensando en eso y cada día se indignaba más de lo que las personas decían del tiempo, escuchaba a las personas reprocharles cosas al tiempo, escuchar a las personas insultar al tiempo la sacaba de quicio y una noche acostada en su cada dijo hablando consigo misma, Me gustaría decirle al tiempo lo importante que es su trabajo, agradecerle por todo y decirle que quisiera conocerlo y ser su amiga, tiempo  –exclamo un poco más fuerte- si me estas escuchando quiero ser tu amiga de nuevo ¿me dejarías?.

     Al crecer a Mary le explicaron varias veces de forma bastante burlona que el tiempo no era una persona pero ella se negó a escuchar, Mary estaba segura que cuando estaba pequeña en su casa escondida entre un jardín cercano había un niño llamado tiempo que la acompañaba a leer y hacia que todo fuese lento o rápido, él podía hacer que ella leyera un libro entero en lo que parecía minutos, ya no se acordaba de su apariencia, ni de su voz pero sabía que no era solo su imaginación, no era solo fantasías de una niña sin amigos ella estaba convencida de que en algún momento el tiempo fue su amigo.
    Como se diría por ahí el tiempo paso y no la dejo atrás, Mary ya había cumplido los 15 años cuando iba a secundaria, era una chica alegre y amable pero algo distraída seguía amando la lectura aunque  estaba demasiado ocupada como para leer demasiado su madre había muerto hace ya varios años. Tenía conocidas en su escuela pero no amigas, ella no tenía  tiempo para amistades, todo le parecía tan estresante después de la muerte de su madre su padre iba a casa una vez cada meses y ella se ocupaba de todo incluyendo el montón de deudas que le dejaron y que pagaba dirigiendo la tienda de postres que su abuela le dejo a su madre y luego su madre a ella lo que le ocupaba todo el día y mientras estaba en la escuela tenía que pagarle a un chico para que llevara la tienda.

La amiga del TiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora