ᎠᎬᎪᎡ ᏴᎡϴͲᎻᎬᎡ | 𝑲𝒐𝒐𝒌𝑻𝒂𝒆 +𝟏𝟖

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-Amor, ¿Dónde está Jungkook?

Pregunta Jimin entrando a la pieza de su esposo, pero al entrar su corazón se derritió.

Su alfa estaba acostado pacíficamente dormido. Aun lado estaba el mayor de los hermanos Kim, recostado en el pecho del mayor.

Jimin sonrió enternecido por la escena. Se acercó hasta la cama donde estaba su alfa e hijo. Con cuidado se acercó primero a la cuna donde estaba su bebé dormido de igual manera. Observando, lleva su dedo índice con un ligero casi siendo nulo rozo con la mejilla de Taehyung. Era su pequeño un ángel y del otro lado estaban sus dos pequeños también. Uno roncaba como un tractor, mientras el otro parecía que si de pájaros escuchara lo pacífico que se miraba.

Jimin al no querer interrumpirlo, se aleja para tomar el libro de psicología que estaba sobre la mesa de noche. Tomando asiento en un sofá recrinable de color crema, donde se sienta todas las noches a cantarle a sus cachorros para luego su alfa llevarlo a sus respectivos lugares de descanso.

Las horas pasaron, como las páginas de aquel libro. Todo era tranquilidad en la habitación principal, hasta que un llanto resonó en la habitación.

Siendo el primero en levantarse ser Jungkook, pasando encima de su padre con torpes pasos hasta la cuna de su hermano.

-TeTe, ¿Por qué lloras? Tu hermano está aquí. -Trata de explicarle. Subiéndose a un pequeño banco que sus padres pusieron para que Jungkook los ayudará a cuidar a Tae.- No tengas miedo los monstruos no existen. Eso dice papá Nam aunque siempre dice que mi tío Hobi es uno.

Jungkook de un salto se mete a la cuna, sin darse cuenta que uno de sus padres estaba mirando la escena desde el otro lado del cuarto. Tomando con sumo cuidado como si de un cristal apunto de romperse toma Jungkook a su pequeño hermano. Tae solo tenía 11 meses y era un bebé.

Tae a ser sujetado por su hermano como si de magia se tratase dejo de llorar escandalosamente, soltando pequeños sollozos que eran inaudibles por un bello canto que provenía de la boca del mayor de los hermanos.

Jimin asombrado por lo ocurrido espera observar toda la escena.

Jungkook con sumo cuidado se acercó a la cuna tratando de dejar a su hermanito, que poco a poco cedía a Morfeo. Tae al sentir la falta del calor cálido suelta un grito de dolor seguido por las lágrimas.

Namjoon de un salto se levanta de la cama. Al escuchar el llanto, corre hasta la cuna pero otro cuerpo se lo impide. Sacándole otro susto acompañado de un grito y una maldición.

-¡Joder! Jimin vas a matarme.

-Estas en lo correcto. Tienes el monitor a tu lado y a tu hijo en el otro. -Reclama.- Jungkook ya calmó a Tae, incluso con el primer grito corrió hacia él, pasando incluso sobre ti.

-Pense que era una pesadilla donde un dinosaurio me aplastaba.

-¡Shhh! TaeTae.

Los mayores se miraron y siguieron las órdenes. Miraron la escena como Jungkook tomó de nuevo entre sus brazos a Taehyung. Jungkook empezó a cantar la melodía que su padre Namjoonie cantaba de pequeño, poco a poco fue cerrando sus ojos.

Ambos se miraron asombrado. Jimin se acercó a sus hijos, tomando de los brazos de Jungkook al menor. Con sumo cuidado lo volvió a dejar en el cunero. Jungkook se acercó a la cuna y su mirada brillaba, un brillo singular. Una galaxia entera se reflejaba en sus ojos. El mayor acarició la carita del menor, Tae al sentir el calor de la mano de su hermano tomó su mano y sonrió complacido.

Algo en el estómago de Jimin se revolvió y su respiración se tensó.

-Amor ¿Sucede algo? -Namjoon pregunta. Su conexión era muy fuerte y más al Namjoon se pura sangre, ambos se sentían por el otro. Y aunque Jimin lo tratase de ocultar era una tontería, era solo sus hijos uno cuidando del otro.

Un amor fraternal...

-Jimin...

-Pensamientos sin sentidos. -Susurró. - Vamos Jungkook, tienes escuela mañana y tienes que descansar cariño.

Jungkook se soltó del agarre de su hermano y salió hasta el baño. Jimin suspiró. -¿Tus pensamientos o es un presentimiento?

-Pensamientos... -Prefirió pensar.- Duerme con Tae, Yo me encargaré de Jungkook.

Le dio la última mirada a su hijo menor y beso los labios de su Alfa. Sin más se adentro al cuarto del mayor de sus hijos, buscando en las cajoneras su ropa de dormir.

-Kookie, cariño tu ropa esta lista. Ven.

El menor salió del baño con una batalla envuelta en su cuerpo. Sube a la cama y se cambió rápidamente con ayuda de su padre Omega. Su padre lo peino pero antes de eso no pasaron de percibir las bromas y juegos entres ellos. Algo llamó la atención en el Omega, Jungkook acaba de cumplir 5 no hace más de una semanas y unos pequeños puntitos salían de sus dientes ¿Eran colmillos?

-Jungkook abre la boca cariño. -Obedeció. Tocó con sus dedos uno de ellos. -¿Cuando te salieron colmillos?

-No lo se. Creo que un par de días atrás.

-¿Duelen?

-No. -Asintió. Probablemente era cosas de alfas de pura sangre. Hizo nota mental de preguntarle a su esposo al rato. Tomó un libro que siempre le leía a sí pequeño. El principito. Se acostaron juntos en la cama y empezó a leer la páginas pero una frase resaltó entre otras.

"Si un día tienes que elegir entre el mundo y el amor, recuerda; Si eliges al mundo perderás el amor... Pero si eliges el amor, con él conquistarás el mundo."

-¿Papá?

-Dime cariño.

-¿Crees que encontraré a mi Omega? -La pregunta desconecto a Jimin. Tarareo antes de responder.- La Diosa lunar lo pondrá en tu camino. Por el momento no te preocupes de ello.

-¿Y si eligo el mundo o él lo hace?

-¿Por qué lo harían?

-No lo se. Es solo un pensamiento.

Nadie lo sabía, ni ellos mismos. Los pensamientos de ambos solían volverse en presentimiento muy reales.

Termino de leer el final de la página, al girar su mirada noto que su pequeño hijo estaba en el mundo de los sueños. Sostuvo la mirada en el menor y sonrió. Era pura sangre por su padre Alfa, también su apariencia era casi simétrica a la del Alfa también. Pero pensaba y actuaba como el Omega y eso era un arma de doble filo.

Ambos podrían dar su vida por los que amaban o complacer a los que amaban. Sacrificar su propia vida y felicidad.

Jimin salió del cuarto con un nudo. No sabía porque pero algo no cuadraba y la curiosidad y la espera reinaba en su cabeza.

Suspiro cerrando la puerta del cuarto.

-Esperare aun que esto me vuelva loco.

Susurro para si mismo. Un presentimiento o un pensamiento. Lo único que estaba seguro era que Jungkook quería a su familia.

Jeonn_teddy  🌙

Volví...