•One Shot Male Reader•

Laito Sakamaki

~Solo nosotros~
Diabolik Lovers
Au normal

Mis labios besaban plácidamente los labios de una
chica, cuerpo pequeño, pechos grandes e ni hablar de sus glúteos, algo que todo tipo - menos yo - desearía tener. Hoy nuevamente estába en el mismo bar que la semana pasada, intentando encontrar al chico de sombrero e pequeños colmillos.

¿Que avía echo en mí?, Me lo preguntaba desde el último encuentro... Él se entregó a mí, dentro de un callejón sin salida, ambos lo deseábamos. No teníamos escapatoria.

- ¡Señor, duele! - La pequeña mujer de tes morena intentaba liberarse del agarre algo fuerte del chico.

- Lo siento, disculpa - rápidamente se disculpó con la chica.

- Bien... Creó que voy con otro cliente, nos vemos joven -

La chica se despidió del peliazul, para, luego ir junto a otro cliente... Pero por la mente de Aoi no dejaba de pasar lo guapo que era su anterior cliente.

-¿Volvería a verlo?-

Al otro lado de la mesada de encontraba el chico de sombrero, pidiendo el 6to vaso de alcohol, en su mente pasaba una idea muy asombrosa - para el -.

- Oye moreno guapo - sus palabras salieron entre cortadas a la par que se movía lentamente junto al mayor.

- Dime?, Pequeño pervertido - Un pensamiento algo indebido paso en su mente al ver al chico que estaba buscando.

- Quiero, quiero retarte a algo - Poso una mano en el abdomen del mayor.

- Soy a todo oído - una sonrisa de lado apareció en su rostro.

- Eh pedido 10 chicas al cuarto 112, para ambos - sus manos bajan al cinturón del moreno - todas llevan vendas en los ojos -

Laito guiaba al más alto al lugar de encuentro con las chicas, al subir las escaleras, antes del cuarto 112 a dos habitaciones antes, Haruki estampó el cuerpo del chico con colmillos en una pared, e procedió a dejarle un chupón.

- Mierda, detente... Ah - el menor se retorció en su lugar, ~ había encontrado su punto débil ~, - joder, besame -

Sin pensarlo el peliazul se lanzó a los labios del más bajó, chupando, mordiendo, hasta que ambos sintieron un sabor a metal... De los labios del pelimarron salía un poco de sangre.

- Creo que fui algo agresivo - una pequeña risa con un pequeño nerviosismo salió de los labios del moreno.

- Creés?, Encerio? - Laito no le dió mucha importancia a eso y nuevamente lo besó - Sabés tenemos a unas chicas  esperándonos -

- Oh maldición... Y si lo cancelamos? -

- No, no, ya pague por ellas -

- Bien -

Ambos chicos se dirigían a la habitación, no les llevó mucho tiempo llegar pero antes de entrar, ambos, se ajustaron la ropa.

_ Narra Haruki _

Por mis adentro tenía una sonrisa enorme, estába muy seguro de que podría estar sonriendo cómo idiota ahora mismo.

- Estábas tan emocionado de pasar un rato con estás chicas? -

- Porque lo dices? -

Cuando pensé que me iba a reponer rápidamente abrió la puerta, permitiendo ver a exactamente las 10 chicas que me avía mencionado antes.

Todas tenían lencerías distintas, al verlas no me ocasionó nada, literalmente, estaban con vendas demaciado gruesas tapando sus ojos, me preguntó porque?.

- Bien, ya saben que hacer - se detuvo un momento - verdad? -

Dos chicas respondieron un suave -si- el cual no parecían muy convencidas.

Laito me hizo un espació junto a él en el sofá, frente a éste estaban los tubos de metal... Las recién nombradas empezaron a quitarse la ropa para así empezar a bailar frente a nosotros.

La música era de esas eróticas, sexuales, al poco tiempo ya estaba aburrido.

- No pensaba hacerlo ahora -

- disculpa? -

Pov Normal

Laito sin dejar hablar al peliazul rápidamente
Se lanzó a sus piernas, así empezando a hacer movimientos va y ven.

Las chicas no sé percatan de absolutamente nada,
Mientras que los otros dos presentes de iban desnudando, Haruki sin pensarlo penetró a Laito.

Haciéndo que este diera un gran gemido de sorpresa,
Luego de acostumbrarse, las estocadas eran más fuertes.

La música les ayudaba mucho pues estaba alta, así permitiéndoles gemir a su gusto. Laito fue el primero en venirse... Luego su amante.

Antes te terminar, pues les faltaban solamente 25 minutos para que alguien más se llevará a las chicas, el chico que tenía un dragón en su ante brazo recibió un buen oral, por parte del pequeño pervertido.

- Puedes ir a casa si quieres, te estaré esperando allá -

Ambos se vienen nuevamente, lo que avían echo fue grandioso... Las chicas al escuchar pequeños gemidos pensaban que se encontraban madurando.

Ambos guapos, ¿Serían heterosexuales no?

~Estában muy equivocadas~

🕊️Fin🕊️