COMPLICADO | JAEDO

Capítulo 15

DOYOUNG

-¿Tratando de escapar de nuevo conejito? –

La temperatura de mi cuerpo bajo por completo, podía sentir el sudor frio recorrer mi espalda. No sabía si mi cuerpo entero había olvidado como respirar o es que el aire a mí alrededor se había acabado, pero me sentía muy débil y mis piernas amenazaban con dejarme caer.

Jaehyun, se encontraba delante mío, vestido totalmente de negro, su altura al igual que su mirada eran abrumadoras.

- No pensé que harías algo tan ridículo como escapar en el auto de tu amante – tenía mi teléfono en mano, solo tendría que correr a una de las habitaciones y llamar a la policía – Pensé que eras más inteligente –

Apenas dio un paso hacia adelante corrí a mi habitación lo más rápido posible, siendo seguido por él, cuando llegue trate de cerrar la puerta, pero esto era inútil puesto que Jaehyun estaba prácticamente pisando mis talones y lo único que pude hacer fue pelear por escapar de su agarre.

- ¡Déjame ir! – ninguno quería perder, pero mi fuerza fue superada por la de Jaehyun al ser arrojado a la cama

- ¡HAS ESTADO VIVIENDO UNA BUENA VIDA CON TU AMANTE, MIENTRAS YO, SUFRIA POR NO SABER DONDE ESTABAS! –

- ¡Suéltame! – sus manos sujetaron mi cuello y las mías buscaban separarlo. Parecía imposible hacerlo debido a que Jaehyun, estaba encima mío con todo su cuerpo y peso

- ¡¿TIENES IDEA DE TODO LO QUE PASE POR TU HUIDA?! ¡¿POR QUÉ TE FUISTE?! –

- ¡Era lo mejor para ambos! –

- ¿Para ambos? – una sonrisa sarcástica se formó en sus labios – Claro, para ti y para tu amante – su agarre que se estaba volviendo suelto, pero volvió a ser ejercido con fuerza

- No… No sé de qué amante me estás hablando –

- Claro, olvide que eres experto negando las cosas – su agarre se suavizo

- Está bien, hay muchas cosas de las que tenemos que hablar – di un suspiro – Pero antes, podrías soltarme y dejarme respirar – lo pensó por un momento y quito sus manos de mi cuello y las puso a cada lado de mi cabeza –  ¿Podrías quitarte de encima? – la poción en la que habíamos acabado era incomoda y para variar… estábamos en la cama

- ¿Qué? No me digas que esta posición te trae recuerdos – una sonrisa se dibujó en sus labios

- Te cansaras –

- No me importa –

- Es incomodo –

- Yo estoy muy cómodo –

- Tus brazos se cansaran por… -

- Si mis brazos se cansan, caeré encima de ti y te abrazare, ¿No sería eso beneficioso para los dos? – lo fulmino con la mirada – No dejare que vuelvas a escapar –

- Prometo no escapar, solo quítate –

- No y antes de que sigas con esta absurda palabrería – su rostro se acerca demasiado al mío - ¿Dónde está mi hijo? –

- Antes hablemos. Dime ¿Qué quieres y por qué nos estas buscando? –

- Preguntas que son sencillas de responder. Primero fue porque te extrañaba, ¿Tú a mí no cariño? – su mano sostuvo mi rostro y trato de besarme pero lo aleje de un manotazo

- No digas tonterías –

- Segundo, porque tenemos un hijo en común. Un hijo con el que te escapaste y que no me dejaste conocerlo. Quiero saber dónde se encuentra mi hijo –

- Está bien, iremos por él, pero antes necesito que te quites de encima – lo empujo con ambas manos

- Estas muy nervioso cariño, no vamos a hacer nada… bueno tal vez pueda cambiar de opinión si ruegas un poco –

- Hablo enserio –

Yo también. No te haría rogar mucho – sus labios estaban tan cerca, un simple movimiento y chocarían entre si

- Vamos por nuestro bebé – lo empujo y él se levanta con una sonrisa

- Nuestro bebé, suena muy bonito – me levanto y arreglo la ropa que se había subido – Dime que no iras así – lo miro con un rostro confundido – Cámbiate, no me gusta verte con la ropa de tu novio o ahora ex novio –

- No es, ni fue mi novio, es mi jefe y tampoco tengo que darte explicaciones –

- Cámbiate o si prefieres que yo lo haga – lo veo levantarse de la cama

- Entonces sal de la habitación para que pueda cambiarme –

- No tienes nada que no haya visto – lo fulmino con la mirada – Puedes cambiarte en el baño -  

Cansado de su actitud me acerco a mi ropero  y encuentro algunas de mis ropas en el armario, debía suponer que las demás están en las maletas, tomo lo necesario y entro al baño para cambiarme.

Con todo lo sucedido perdí mi celular en algún momento del forcejeo y no había forma de comunicarme con Taeil. No tenía otra opción más que ceder ante Jaehyun, sentía frio al ir quitando las prendas de mi cuerpo, aún estaba nervioso, no podía confiar en Jaehyun, pero no sabía que más hacer.

- Tu piel sigue tan bonita como siempre – sentí unos dedos fríos bajar por mi espalda – Eres como un lienzo en blanco, listo para ser marcado –

- ¿Qué haces aquí? – golpeo su mano y me alejo de su toque. La vergüenza subía por mi rostro, me encontraba en ropa interior, estaba casi desnudo y delante de la persona que más detestaba

- Entonces no tuviste acción esta noche –

- Retracta tus palabras – lo miro molesto y busco alejarme de él

- Si es el caso… ¿Por qué tus labios tienen esa marca? – con pasos rápidos se acercó y puso sus dedos sobre la herida que tenía en el labio inferior – Sigues mordiendo tus labios por el nerviosismo – sus dedos acariciaban mis labios como lo hacían antes de que nuestros cuerpos se encuentren en la cama

- Si no sales de aquí, seguiremos perdiendo el tiempo y ni creas que me voy a cambiar delante de ti –

- Como usted lo pida – me doy la vuelta para recoger la ropa, pero dos manos en mi cintura me lo impiden

- ¡Jaehyun! – sus labios se posan sobre mi cuello y el calor vuelve a subir por mi cuerpo

- Tu aroma es como lo recuerdo, tan relajante – una de sus manos acaricia la parte delantera de mi cuerpo - Es la cicatriz del parto ¿cierto? – mi cuerpo se estremece al sentir su suave tacto y su cálido aliento chocar con mi piel

- Lo es, ahora vete – quito sus manos y el solo se aleja con una sonrisa, muerdo mis labios y por el espejo puedo ver mi rostro sonrojado y mis pezones erguidos…

Solo es el frio, solo el frio, más vale que me dé prisa para vestirme.