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ㅡ ¡¡Taehyung!!

Se sentó, apretando las sábanas entre sus manos.
Miró con miedo a su alrededor, tratando de recordar dónde estaba.
El despertador en su mesita llevaba sonando un rato y eso lo confundió un poco.
Siete treinta. ¿Llevaba sonando media hora?

Dio un pequeño salto, asustado, cuando su mamá entró de repente a la habitación.

ㅡ ¡¿Es que no oyes la alarma?! ㅡ caminó con furia hacia el despertador, tomándolo y arrojandolo al suelo. El objeto se rompió en pedazos.
Jungkook alzó sus cobijas hasta por debajo de sus ojos, ocultandolos con miedo.
ㅡ ¡¿Acaso crees que todo el mundo debe despertarse a la misma hora que tu?!
Si vas a poner una alarma, levántate a la escuela ¡o no pongas una mierda!
¡¿Estás oyendome?!

Se descubrió.
ㅡ Sí, mamá, lo siento.

ㅡ Iré a dormir, ¡ni un ruido más, Jeon Jungkook!

Y así como entró, salió.

El corazón del ahora pelinegro estaba acelerado.
¿Qué era esto?

Se levantó con velocidad de la cama, mirándose rápidamente en el espejo de su ropero.
Un Jungkook de diecisiete años se presentó ante él.

ㅡ... ¿Entonces lo soñé todo?

Entre confundido y aliviado, salió de la habitación y corrió a la calle; sin importarle que llevara aún su pijama.

Dio la vuelta a la cuadra y llegó a la casa de los Kim.
Golpeó con desespero la puerta.
Él tenía que estar ahí.

Al rato fue atendido por la señora Kim, que lo miró asustada. Por su cara, era obvio que los golpes del chico la despertaron.
ㅡ ¿Jungkook? Dios mío, ¿por qué tocas así? ¿Qué pasa?

ㅡ ¿Taehyung está aquí?

Ella se mostró extrañada.
ㅡ Jungkook, cariño... Tae... Tae se ha ido.

Jeon la miró con espanto ㅡ ¿Qué?...

La mujer rascó su cabeza con pereza ㅡ Sí, cariño. Tae ya salió hacia la escuela hace rato ㅡ bostezó ㅡ Perdona si hablo lento, aún estoy dormida.

El alma le volvió al cuerpo al escuchar eso.
ㅡ Gracias, ¡tengo que alcanzarlo!

Jungkook salió corriendo en dirección a la escuela, confundiendo aún más a la mujer.
ㅡ Pero... Estás en pijama...

ㅁㅁㅁㅁㅁㅁ

Taehyung caminaba con su mochila al hombro, mientras miraba su celular y saboreaba un chupetin.

Estaba por llegar a la escuela, y si no fuera por los auriculares que llevaba, hubiera escuchado a aquel agitado chico que lo llamaba desde hacía un par de cuadras.

Se detuvo al ver un gatito cruzar frente a él e intentó sacarle una foto.
Pero no tuvo tiempo, ya que fue impulsado hacia adelante por unos brazos que rodearon su cuerpo.

ㅡ ¡Taehyung, ¿estás sordo?!

El pelirrojo tomó el dulce de su boca y alzó las manos, dándose la vuelta como pudo.
ㅡ Bueno, Jungkookie, ¿pero qué pasa? ㅡ intentó apartarlo, pero el rostro del menor se estrujó contra su pecho.
Taehyung sonrió ㅡ Vaya, qué amorosos amanecimos hoy.

Negó ㅡ No tienes idea de la noche que tuve ㅡ se separó, mirándolo a la cara ㅡ Taehyung, tuve el sueño más raro y horroroso del mundo.

Taehyung miró hacia los lados, las miradas curiosas de los demás.
ㅡ Bien, Jungkookie, estoy dispuesto a oírlo, pero, ¿te diste cuenta de que estás en pijama?

In another lifeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora