Wolfstar Oneshots

Quejicus y Lunatico

Remus, uno de los chicos más inteligentes de la escuela, tenía dos problema. El primero era que era un licántropo. Y el segundo, era que estaba perdidamente de Sirius Orión Heterosexual Black.

Los dos eran problemas muy graves, pensaba el de ojos miel. Pero un día, mientras desayunaba, encontró algo en una revista:

¿Usted tiene algún problema relacionado con la licantropía? ¡Poción mata-hombres lobo!
Esta poción hará fácilmente que en las noches de luna llena, se comporte como un ser humano normal! Fin a ser un hombre lobo. La poción es 99% efectiva, está comprobada por los medimagos más conocidos del mundo mágico.

Remus casi dio un salto de la emoción, pero se calmó. Al fin, cuando miro el precio, su sonrisa desapareció por completo, ni con el sueldo de toda su vida podría pagar esa cantidad de galeones! Se entristeció, pero recordó que su casi amigo era Severus Snape, y tal vez si hacia algo a cambio, le prepararía esa poción que deseaba con ansias.

Sin avisar a sus restantes 3 amigos, se levantó de un salto y se fue hacia la mesa de los Slytherin.

"Hola Snape" dijo el castaño con una sonrisa de oreja a oreja.

"Que quieres, Lupin?" Respondió el pelinegro sin quitar su mirada de su revista.

"Te vez increíble hoy... ah! Que crema usas para tener esas manos?" Le dijo Remus.

Snape lo miro frio a los ojos.

"Que quieres? Que te pase la tarea de pociones? Si es eso, te aviso que no, Lupin" dijo Severus en tono frío.

"Que? No! Es que... podemos hablar a solas?" Pregunto Remus.

Snape entrecerró sus negros ojos y asintió, levantándose para irse con el chico castaño a los pasillos.

Lo que ambos no sabían, era que un chico de ojos grises y cabello negro los observaba atentamente, con una ola de celos que parecía ocultar muy bien, ya que ni James como Peter se dieron cuenta que estaba con unas gigantescas ganas de matar al que solían llamar: Quejicus.

Y si, por si se lo preguntaban, Sirius Black estaba perdidamente enamorado de Remus Lupin, desde el primer momento en que sus miradas cruzaron.

Pasaron algunas semanas y el rumor de que Snape y Lupin estaban saliendo se extendió por culpa de un chico Huffelpuff que había visto a los dos juntos entrar a la sala de pociones, cuando claramente las clases de esta eran mucho más tarde.

Y Sirius parecía un perro rabioso, nadie sabía por que, excepto un tal chico pelinegro de anteojos redondos.

Si, James era el más grande Wolfstar shiper de la historia, y llevaba un buen rato deseando que Remus y Sirius terminasen juntos.

Un día, el ojigris se despertó dándose cuenta que su castaño compañero no estaba otra vez, y esa también fue la última, pensó el.

Estaba harto de la relación de Snape y Remus.

El los iba a buscar con las manos en la masa, y el no sabía exactamente para que le beneficiaría, pero es Sirius, tampoco es que le importe.

Solo quería ver a Quejicus adolorido en el piso por haber tocado a su Remus.

Sin siquiera ducharse o PEINARSE, salió con paso furioso de la habitación dirección sala común de Slytherin.

Al llegar, no podía entrar, por obvias razones. Pero vio a un Slytherin llegar y le preguntó en tono agitado:

"Oye tu! Viste a Quejicus? Quiero decir, a Snape?"

"Ehm si, lo vi irse en dirección a la torre de Astronomía con un chico Gryffindor." Le respondió el Slytherin.

Los puños de Sirius se apretaron. El lugar perfecto para besuquearse, pensó el pelinegro.

Después de agradecerle salió con paso rápido hacia la torre de Astronomía.

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Remus y Severus se encontraban en la torre mientras Snape preparaba una poción y Remus le pasaba los ingredientes necesarios.

"Pásame las patas de rana." Pidió el pelinegro sin dejar de mirar en su caldero.

"Claro." Respondió Remus y estiro su mano por delante de la barriga de Snape.

Entonces justo cuando rozó con sus dedos el frasco, sus rodillas se resbalaron y su cuerpo cayó sobre en del pelinegro, haciendo que el cuerpo de Remus este sobre la barriga de Severus.

En ese preciso momento, la puerta de abrió de repente y era Sirius.

"Interrumpo algo?" Preguntó el ojigris mirando desafiante a Snape, quien aún no reaccionaba en la poción que estaba.

"Sirius" dijo Remus y se levantó de un salto, sonrojado.

"Oh, lo siento. Arruine tu momento de cariñitos con tu novio?" Preguntó Sirius sarcásticamente.

"Sirius, que te pasa?" Pregunto Remus por fin, después de semanas con un Sirius comportándose extrañamente.

"¡Lo que pasa es que estás todo el tiempo con Quejicus, y al parecer es tu novio y nunca te diste cuenta de que... me gustas!" Sirius se sonrojó al instante.

El pelinegro se dio cuenta del error que había cometido al decirle eso a Remus, ya que estaba en una relación.
Justo antes de que se girara para irse, sintió chocar unos labios contra los suyos. Mm... chocolate. Justo como pensé.

Este correspondió agarrándolo de la nuca y Remus lo agarro de la cintura, sin separar sus labios.

"En serio chicos? Ay, por favor!" Dijo Snape.

Sirius le levantó el dedo del medio, aún sin abandonar la boca de su Remus.

Snape recogió todos sus libros y se fue, dejándolos solos.

Los dos se separaron, aún con el sabor del contrario.

"A mi también me gustas, Sirius. Y quiero ser tu novio" dijo Remus manteniendo su respiración.

Sirius sentía que se moría por dentro, y asintió con mayor fuerza que quiso y vuelvo a besar a su ahora novio con pasión.

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WOLFSTAR ES MÁS REAL QUE LA EXISTENCIA DEL PAN.