Capitulo 34

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**SI EL CONTENIDO SEXUAL TE HACE INCÓMODO, POR FAVOR NO LEAS ESTE CAPÍTULO**

Darian: "Jean está arriba con Matthew en este momento y creo que lo va a acostar, pero luego nos dirigiremos a su casa, si te parece bien."  Le pregunté a mi madre.  Ella asintió con la cabeza, asegurándome que se haría cargo de él.  Sonreí mientras la abrazaba y le agradecía antes de tomar algunos bocadillos y correr de regreso al piso de arriba. Jean había pedido un poco de chocolate que le arrojé.  Tenía a Matthew queriendo un poco, pero tuvimos que limitarlo ya que pronto sería su hora de acostarse.  Lo agarré en su lugar, haciéndole cosquillas y jugando con él para distraerlo.  Habíamos pasado todo el día con él, ya que Jean se había quedado anoche y ni siquiera había ido a casa hoy.  A Matthew le encantó cuando lo llevamos a almorzar y luego nos metimos a la piscina con él. Sin embargo, todavía no habíamos hablado con él y pensé que esta noche sería genial para ver cómo reaccionaba mañana por la mañana. 

Lo puse en mis piernas mientras le daba besos y lo abrazaba.  Jean dejó el chocolate para poder abrazarnos, acercándome a su lado y envolviendo sus brazos alrededor de mí.  Nos relajamos y Matthew se sentó frente a nosotros mientras se sentaba cómodamente sobre mis muslos. "¡Mami y yo tenemos algo de qué hablar contigo, amigo!"  Dijo Jean, llamando su atención.  Ya habíamos hablado de esto antes y Jean había pedido poder ser el que hablara con él.  Estuve de acuerdo en dejarlo ya que probablemente necesitaba que él lo asegurara de todos modos. "Mamá me ha contado que lloras cuando no estoy aquí, ¿por qué está pasando eso?"  Preguntó, Matthew frunciendo el ceño como si estuviera en problemas.  Le aseguramos que no lo estaba, pero queríamos saber cómo se sentía.  Era difícil tener este tipo de conversaciones con niños pequeños, pero Matthew era inteligente y a menudo podíamos hablar con él sobre muchas cosas. "Te extraño cuando no estás aquí, papá ...", dijo, poniéndome triste. 

Jean tomó mi mano mientras la apretó para hacerme sentir mejor, pero recibió a Jean en sus brazos con su mano libre.  Matthew saltó directamente a sus brazos mientras Jean le besaba la frente.  "No siempre puedo estar aquí por las mañanas, pero eso no significa que no vaya a visitarlos tan pronto como pueda".  le dijo, Matthew asintiendo.  "No quiero que llores más, está bien, eso me pone triste" Matthew asintió mientras prometía que no lloraría más.  "Nunca me vas a dejar papi, ¿verdad?"  le preguntó, mirándolo a los ojos.  Pude ver el dolor en los ojos de Matthew, dolor que provenía de cosas que ni siquiera conocía.  Era una locura cómo los niños lo sentían todo, no importaba cuánto traté de protegerlo, todavía estaba dañado por todo eso. "Te prometo que nunca ..." Jean susurró mientras lo abrazaba.  Se quedaron así hasta que Matthew se durmió y Jean lo llevó a su habitación. 

Matthew debió despertarse de nuevo porque Jean se quedó en la habitación con él por un tiempo antes de regresar. Me acosté en mi cama, extendiendo mis brazos hacia él tan pronto como lo vi entrar en mi habitación.  Me sonrió mientras se tiraba sobre mí y me besaba antes de acostarse encima de mí.  Jugué con su cabello antes de pasar mis manos por debajo de su camisa y frotar su espalda.  "¿Cómo está mi bebé?"  Le pregunté, Jean me dijo que estaba bien, pero me miró con preocupación.  "¿Crees que es realmente lo mejor irse esta noche? Me siento mal al irme después de esa conversación que tuvimos con él". Sonreí por lo dulce que era Jean, realmente tenía el corazón más grande del mundo.  Era tan nuevo en la crianza de los hijos que todo lo que siempre quiso hacer fue mimar a Matthew y complacerlo. 

Quería hacer lo mismo, pero sabía que no podía poner mi vida en espera solo para hacer eso.  Sabía que Matthew estaría bien, tenía a mi familia con él y aprendería que no había necesidad de llorar todas las mañanas que nos faltaban. "Sé que tienes las más puras intenciones ... pero Matthew estará bien. Además,  Puede que sea yo quien no esté bien si no te tengo esta noche ... "Susurré seductoramente en su oído, envolviendo mis piernas alrededor de su cintura.  Sonrió mientras me levantaba, sosteniéndome en sus brazos mientras se levantaba de la cama.  "¿Tienes todo lo que necesitas? ¡Nos vamos!"  Dijo, sin querer perder más tiempo. Me reí mientras agarraba una bolsa antes de dejar que me llevara escaleras abajo. 

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