Capítulo 8

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Cuando Jaemin despertó a la mañana siguiente, Mina ya no estaba en la cama. Él la encontró en la sala, sentada en medio de Jeno y Yeri, comiendo el desayuno que probablemente ordenaron.

Todo el mundo estaba ahí, vestidos con la ropa de la noche pasada, luciendo cansados pero contentos.

"Buenos días" él dijo para nadie en particular y casi todo el mundo lo saludó con sus bocas llenas.

Jaemin se sentó al lado de Lucas en el descansabrazos de la silla. Cogió un muffin de chocolate del plato que estaba lleno de dulces y frutas. Se quedó mirando el muffin por un tiempo tratando de no hacer contacto visual con Jeno. Se sentía un poco raro por lo que había pasado la noche anterior, igual que se sintió el día después de que Jeno le hizo el handjob. Pero Jaemin decidió olvidarlo porque el mayor estaba actuando normal, provocándolo y haciendo bromas en todo el desayuno.

Cuando Mina les dijo que había sido la mejor noche, ya que había dormido mejor que nunca, Jeno hizo contacto visual con Jaemin y le guiñó un ojo, mordiéndose el labio inferior.

Jaemin no pudo aguantar las ganas de sonreír y Mina sonrió de vuelta porque pensó que la sonrisa fue para ella.

"Entonces, ¿Qué harás para tu cumpleaños?" ella preguntó mientras bebía lo que quedaba del jugo de naranja.

"Estoy pensando en tirar una fiesta de piscina en el hotel de mi tío." Jaemin dijo y Yeri asintió emocionada.

"Pero será un día antes que mi cumpleaños. El 23 porque mis padres me quieren en casa para la navidad."

"¿Tu tío es dueño de un hotel?" Renjun preguntó sorprendido y Jaemin asintió.

"El hotel, St. Paul's"

"Ese uno de los hoteles más costosos" Jeno habló.

"Por supuesto que lo es."

Terminaron de desayunar faltando quince para las doce y en la tarde estaban haciendo el check-out del hotel. Y si Jaemin reportó a la chica de la puerta por acostarse con un cliente no era el problema de nadie, solo suyo.

La semana siguiente estuvo llena de otros dos exámenes y estuvieron listos con la escuela por el resto del año. Mina venía casi que cada noche y a Jaemin no le importaba el hecho de que todo lo que hacían era dormir y a veces besarse. Incluso, raramente se abrazaban y Jaemin estaba bien con eso.

No sabía si sentirse culpable por el hecho de que Jeno lo había hecho venir y viceversa o por no sentirse culpable de nada realmente.

No había visto a Jeno desde el otro día de la ceremonia y para ser honesto, estaba un poco nervioso por su fiesta de cumpleaños. Esta iba a empezar en dos horas, sabía que el pelinegro iba a venir y también sabía que todo el mundo tendría su propia habitación en el hotel.

La madre de Jaemin ordenó su traje de Dolce & Gabbana y Jaemin estaba emocionado por usarlo porque este era el más costoso que había. El traje era muy liso y tenía zapatos que combinaban con este. Además de una linda camisa negra con cuello blanco. Su cabello estaba peinado en un suave flequillo y no podía estar más emocionado al respecto.

Toda la familia de Jaemin iba a venir pero sus padres le prometieron que todos se iban a ir a las diez para dejarlo con sus amigos.

La fiesta primero iba a tomar lugar en el restaurante, donde todo mundo podía comer y su familia podía ir también. Entonces, cuando los adultos y niños se fueran a sus habitaciones, la fiesta tomaría lugar en la piscina donde ya había un gran bar y un DJ.

Y Jaemin estaba extremadamente feliz porque podría finalmente beber en frente de sus padres y sentirse oficial. El pastel lo traerían a la media noche, este estaba decorado con diferentes colores y sabores, en la base había dieciocho cupcakes, cada uno con una vela en medio para que Jaemin las sople.

El cielo en tu mirada - NominDonde viven las historias. Descúbrelo ahora