Hi bye mama

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Capitulo 9: Hola y Adiós a tu Luz.

*Años atrás*

Angela estaba esperando en la parada de colectivos a que Agustín regresara del trabajo, fue por que sabia que su novio no estaría bien, después de todo hoy Agustín presencio por primera vez la muerte de uno de sus pacientes y Angela quería ayudarlo a que se sienta mejor.

-Puedes ser medico toda tu vida pero nunca te acostumbraras a la muerte de tus pacientes, ademas trato a este paciente mucho tiempo, Agustín debe estar deprimido-pensó Angela.

El autobús llego, ella rápidamente corrió a esconderse entre las personas, Agustín bajo con una mala cara del autobús y comenzó a caminar arrastrando los pies hacia un costado mirando el piso, Angela lo comenzó a seguir atrás, saco su celular y le mando un mensaje.

-Si caminas así nunca llegaremos a casa, ¿o mejor por que no te das vuelta?-

Agustín saco su celular y leyó el mensaje, volteo rápidamente y vio a Angela parada a unos pasos de el con una sonrisa, extendió sus brazos para que el la abrazara.

-Ven-

-¿Hace cuanto me estas siguiendo?-pregunto sonriendo.

Angela corrió hacia el y lo abrazo fuerte,el correspondió al abrazo, lo necesitaba.

-Debiste correr vos a abrazarme-lo reto ella separándose de el.

-Perdón, pero ¿me estas siguiendo desde el hospital?-ella negó-Eres una acosadora-la tomo de la mano-Mi acosadora-comenzaron a reír, Angela logro que Agustín volviera a sonreír.

Hubo un tiempo en que podía animarlo cuando las cosas estaban oscuras para Agustín, para que no deambule por la oscuridad por mucho tiempo, entonces no estaría desesperado.

Cuando Angela murió, Agustín no salia de su habitación, ni siquiera comía la comida que le dejaba Stefania, solo lloraba, cayo en depresión, una depresión de la que Angela no podía sacarlo ya que no estaba a su lado. Paso un mes y Agustín debió volver a trabajar pero su cara no cambiaba, en ella reflejaba la tristeza que sentía, Angela ya no estaba ahí para encender su luz.

Ver a tu ser querido perder la luz en su vida, alguien necesita poner una luz para el por que esta vagando en la oscuridad, pero esa persona ya no puedo ser yo, cuando me di cuenta de eso estaba desesperada.

Agustín una noche, luego del trabajo, fue a un Bar cerca de su casa a beber un poco, Angela estaba a su lado, acariciando su cabello.

-¿Por que no comes un poco?-le decía, aunque el no escuchaba.

Sofia, que en ese entonces era la compañera de trabajo de Agustín solamente, lo encontró en el Bar y decidió ir a sentarse frente a el para hacerle compañía.

-Mesera-dijo sentándose-Quiero dos hamburguesas y una cerveza-le pidió, Agustín la miro-Hola Agustín, te vi solo y quise acompañarte, no me gusta comer sola, ¿comemos juntos?-

-Bueno, pero yo no quiero nada de comida-le respondió-Mesera-llamo a la mujer que atendía-en lugar de dos hamburguesas...-

-¡Espera!-lo detuvo Sofia-Las dos hamburguesas son para mi, no canceles nada-

Cuando el pedido estuvo listo, le sirvieron la comida Sofia, ella comenzó a comerlas muy animada, le gustaba comer, Agustín solo la observaba, no podía creer que comiera tanto y no engordara.

-¡Tranquila! come despacio-rió un poco Agustín, Angela lo miro.

-Es que la porción aquí es pequeña-respondió ella, Agustín miro que las hamburguesas no eran nada pequeñas, Sofia se atraganto y comenzó a toser.

One Shots Y Adaptaciones AngestinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora