Un 7 de junio del 2019 en Tokio, Japón, Bokuto conoce a su alma gemela.
Y aunque su historia de amor suene como un cliché que ya se ha visto cientos veces antes, Bokuto estaba dispuesto a vivir la misma historia una, otra y otra vez si eso significa...
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La conexión del cielo estrellado "
Su conexión va más allá del universo"
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14 de junio 2019, 6:39 PM
Cuando Akaashi salió de clases ese día, a mediados de junio, no le extrañó que Bokuto ya estaba esperándolo en la entrada de su facultad. Realmente, desde que lo había conocido, eran pocos los días en los que no lo veía aunque sea porque recibía sus visitas diarias en el trabajo y almorzaban juntos. Y cuando no podían verse, se llamaban por horas hasta que Kuroo los interrumpía exigiendo descanso.
—¡Hey, hey, hey!—saludó, levantando en brazos un balón de voleibol.—¿Estás listo, Akashi?
Le había prometido que algún día iba a levantarla para él, y después de tanta insistencia de parte del mayor, ese día por fin había llegado.
—Estoy listo, Bokuto-san—contestó, mientras empezaban a caminar juntos hacia la cancha universitaria.—No sé porque está tan emocionado, le advierto que dejé de jugar en secundaria así que no espere tanto de mi.
—¡Es porque somos almas gemelas!—Bokuto no se cansaba de gritarle a diario que eran almas gemelas, y aunque al principio le pareció una tontería, Akaashi estaba bastante avergonzado porque empezaba a creerlo también.— ¡Tan solo imagina la coordinación que tendríamos si estuviéramos en el mismo equipo!
—Eso no tiene nada que ver, en dado caso, no olvide que usted juega a un nivel profesional y yo jugaba a nivel de estudiante.
—¡Akashi, no deberías subestimarte, ni a ti, ni a nuestra conexiónuniversal!
Estuvo apunto de argumentar algo con mucha coherencia, pero la mirada ámbar de Bokuto directo en sus ojos volvió a causarle esa sensación curiosa.
—Supongo que tiene razón, Bokuto-san.—le era imposible contradecirlo cuando eso pasaba.
Al llegar a la cancha universitaria se encontraron con Kuroo, Kenma, Lev y dos chicos que no conocía de absolutamente nada. Tanto Lev como uno de los chicos nuevos parecieron sacar estrellitas por los ojos cuando vieron a Bokuto aparecerse.
