angel » jeon jungkook

Due

En el resto del día no hubo ningún suceso destacable tras lo del baño. Entregué los documentos que "mis padres" —o más bien Nara— firmaron y así estaba decidido que me iría a los Estados Unidos con Yoora.

Después de las clases nos dirigimos hacia la salida del instituto.

—Tengo tantísimas ganas de ir... —dice Yoora con un suspiro. —Este sitio es un asco, la gente da asco...

—Yo también, la verdad, necesito olvidarme un poco de todo esto.

—¿Y qué mejor sitio que Estados Unidos? ¡Quizás conozcamos a algún famoso! —dice soñadora por lo que yo me río.

Frenamos en seco porque alguien nos rodea los hombros con los brazos, aunque enseguida reconozco quien es.

—¿En serio me vais a dejar aquí solo? —oigo la voz de Jimin. Cuando ve a Yoora asentir frenéticamente sopla. —Joder, chicas... y solo porque yo doy francés en vez de inglés, que asco.

Park Jimin, además de Yoora, es mi otro mejor amigo, además del hijo del director. Nos conocemos básicamente desde que nacimos y desde entonces hemos sido muy cercanos. Es como el hermanos que jamás he tenido. Es muy protector con ambas, pero especialmente conmigo, porque sabe como soy. Es la única persona del mundo que sabe lo mío con Taehyung, y me aconseja sobre ello, y no le hace especial gracia. Además, es gay, cosa que solo Yoora y yo conocemos. 

Ambas nos reímos fuerte por su reacción. Es cierto le íbamos a abandonar por el intercambio, pero tan solo serían unos meses.

—Bueno, ¡esta noche fiesta! —dice Yoora y hace un bailecito raro. —Acordaros a las 20:00 en mi casa, cenamos juntos y luego nos vamos a casa de Jaehyun, que es el que da la fiesta.

La verdad es que Jaehyun es un completo idiota —del estilo de Taehyung— pero sus fiestas son increíbles. No importa quien de la fiesta, estaré con ms amigos y me olvidaré un poco de todo.  Espero que Nara vaya y... espero que Jungkook vaya.

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Jeon Jungkook; 15:25

Me encuentro mirando el techo, sin muchas ganas de hacer absolutamente nada. Le doy vueltas y rebobino el día de hoy en la cabeza. Suelto una risa leve. Caray, jamás pensé que podría encontrar tata mierda junta. No hay más que idiotas, cada cual más que el anterior, en el nuevo instituto. Está claro que son todos niños de mamá y papá, que solo deben preocuparse por complacer sus caprichos de mierda, esperando que papá pague sus cagadas.

Salgo un poco de mis pensamientos cuando noto mi teléfono vibrar en el bolsillo delantero de mi pantalón. Lo saco y me sorprendo al ver el nombre en la pantalla. Suspiro y me incorporo, dirigiéndome hacia fuera, en busca de mi padre. Devuelvo mi mirada al teléfono. Pensaba que al mudarme dejaría de llamarme.

Una vez fuera de la casa me encuentro la figura de mi padre apoyada en un árbol y con el teléfono en la oreja. A medida que me acerca oigo que no está hablando coreano sino japonés con la otra persona. Negocios. 

Él repara en mi y veo como dice algo rápido en japonés y corta la llamada dirigiendo su atención a mí.

—Kook, ¿Qué tal tu primer día? —dice con una sonrisa. Yo me rio levemente de forma sarcástica como respuesta inmediata.

—Pues mal —digo suspirando y echando la vista al cielo. —Oye papá, ¿podrías llevarme al barrio? Quiero coger la moto. —Él frunce un poco el ceño ante mi respuesta y suspira cerrando los ojos.