Ilusión hecha amor

Capítulo 5-Me volví a ilusionar o creo que enamorar.

Con tanto pasar del tiempo y como mi relación iba mal decidí salir un poco y alejarme unos días de Lola.

Luego de dos semanas sin saber nada de Lola y por el problema aun de Michelle y Lola, le pedí un tiempo a Lola, ella acepto sin problemas. Conocí a Karla y a Vanessa, las grandes amigas de Michelle. Bueno me hice algo amigas de ellas y no sé porque pero Vanessa me invito a su fiesta que iba a ser en unos días y yo acepte con el fin de hablar con Michelle pero sobre otros temas, quería volverla a ver para decirle algunas cosas de mi vida, además buscaba hacerla reír con algo que solo los dos sabemos.

Llego el gran día y fui a buscar la casa de Vanessa. Ya estaba perdido y enojado, iba a regresar a casa cuando un taxista me dio una ayuda y me dijo como llegar hacia la casa de Vanessa, así que logre llegar y vi a las chicas afuera de la casa, incluso a Michelle. Cuando llegue hablamos sobre su problema y luego empezó el baile. Debo admitir que ese día no quería ir debido a que andaba mal por el tiempo entre Lola y yo pero intente sonreír aunque para rematar ponían músicas así de amor y una de desamor y Michelle le pedía a Vanessa que cambie la música, yo me reía por dentro.

Bueno después baile un poco con ellas, bueno casi nada hasta que me hicieron bailar con la única chica que considere linda, Rocío.

Rocío era una chica casi de mi porte, en ese día aún tenía 12 años, nunca olvidare como estaba vestida. Bailamos un poco y solo eso basto para ilusionarme de nuevo. Pero al pasar de los meses me estaba gustando.

Después, cuando me iba a ir, Vanessa me acompaño a irme y me dijo algo de Lola, quería llorar y casi lo termino haciendo en mí casa pero me las aguante. Michelle no quería que Lola se entere que fui a esa fiesta pero yo hice que ella se entere. Fue gracioso ese día para mí aunque triste.

Me entere que el Bingo se haría el 31 de Octubre, sería una gran oportunidad para volver a ver Lola pero también quería volver a Rocío, así que nació un problema:

¡Vería a Lola y a Rocío el mismo día y en el mismo lugar!