Una vez más... (WIgetta Fanfic [+18])

Te necesito. AHORA

Ya había pasado casi una hora desde que Cristina, María y Silvia habían salido. En eso me llegó un mensaje de Silvia, que decía:

"Guapi! Que nos hemos encontrado unas ofertas en el Mall, y le voy a comprar una cosillas a María 😘. Y como soy la madrina oficial, la quiero consentir."

Yo le mandé una respuesta rápida diciendo que no se preocuparan, que nosotros estábamos bien. Habíamos estado charlando y jugando, que se tomaran todo el tiempo necesario. Yo no tenía prisa de nada, además quería disfrutar lo más que pudiera la compañía de Willy. Y tanto Willy como Cristina necesitaban un descanso de estar juntos. No había pasado nada grave entre ellos, simplemente estaban agotados por la bebé y diferentes cosas. Y un momento entre amigas le vendría bien a Cristina, y a Willy le vendría muy bien un momento con su mejor amigo.

Mientras las chicas estaban de compras Willy y yo estábamos jugando Rocket League. Aunque jugar videojuegos es nuestro trabajo seguimos disfrutando de echarnos unas partidas casuales de vez en cuando, y estar juntos. Cuando terminamos uno de los partidos Willy se paró al baño y a por más bebidas. Lo estábamos pasando muy bien, aún después de algunos momentos incómodos, todo estaba bien.

Al regresar me dijo que ya se había cansado de jugar, y me preguntó si mejor veíamos una peli o alguna serie en lo que llegaban. Yo le dije que sí. Nos preparamos unas palomitas y nos sentamos en el sofá para escoger algo de alguna plataforma.

-¿Qué quieres ver?- me preguntó mientras se sentaba junto a mi.

Le dije que pusiera alguna película de acción, él escogió cualquiera y la empezamos a ver. Al principio todo estaba muy tranquilo, pero poco a poco Willy se fue acomodando más cerca de mí; claramente a mí no me molestaba, si por mi fuera estaríamos abrazados. Y en el momento en el que pensé en eso, pareció como si Willy me hubiera leído la mente. El mismo tomó mi brazo y lo pasó sobre sus hombros. Yo me acomodé mejor y lo abracé más firmemente. Los dos estábamos bastante cómodos, no sé sentía nada raro, esto era algo que habíamos hecho cientos de veces. Y se sentía tan normal como respirar.

Pensé por un momento en la conversación que habíamos tenido Willy y yo, sobre su vida amorosa. Que no se sentía satisfecho. Digo, era entendible que su mujer no se sintiera con las ganas de hacerlo, acababa de parir, supongo pero era normal. Pero conociendo a Willy y sabiendo que es una persona muy cariñosa y libidinosa, entendía perfectamente que estuviera tenso y necesitado. Y sinceramente a mi no me molestaría ayudarlo, con eso. Claro, que no podía sugerirlo, más que nada por pena y miedo a que me rechazara. Después de todo hace años no éramos pareja.

Hubo un momento en el qué volteé a ver a mi compañero, se veía tan tranquilo, veía la película con una calma que hace mucho no le veía. Sonreí. En eso Willy sintió mi mirada, volteó a verme y me también me dedicó una sonrisa. Esa sonrisa perfecta que hacía que sus ojos se hicieran aún más pequeños y quedaran como líneas. Y una vez más quise ser yo el que durmiera a su lado todas las noches, quise ser yo con quien tuviera una hija y una familia. Nos vimos tan fijamente y nos perdimos tanto en la mirada del otro que no nos dimos cuenta cuando nos estábamos acercando. Sentía su respiración sobre mis labios, y de un segundo a otro ya nos estábamos besando.

Sus labios los conocía tan perfectamente que no me molestó que tuviera barba (cuando estábamos juntos casi nunca se dejaba la barba tan larga). Me tomó de la mejilla y me siguió besando, cada vez un poco más intenso. Su lengua y la mía se movían en unísono, de nuevo, como si fuera algo que hicieran todos los días. Todo eran tan familiar, tan conocido, que las cosas simplemente se fueron dando.

-Vegetta- dijo entre besos y respiraciones agitadas. -Vegetta...- repitió de nuevo mi nombre y paré de besarlo.

Se veía sonrojado, me encantaba verlo así. Pero por un segundo pensé que iba a decir que parasemos, que esto estaba mal, mi corazón se aceleró. Pero no lo hizo.