01 . Encuentro al Azar

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Había muy pocas cosas en la vida que no podías explicar, principalmente por tu sed de conocimiento y posición racionalista. Necesitabas ver para creer, la mente dominaba al corazón. ¡Pobres de las criaturas de se dejaban guiar por las emociones,  destinadas a una muerte prematura!

Observaste tu mano extendida. De tu palma abierta cayó un papel, danzando suavemente en el viento. No hiciste ningún intento por agarrarlo, solo giraste la cabeza hacia el hombre parado a tu lado. Le exigiste una explicación con la mirada.

–  Hooh, lo siento. – Su disculpa carecía de sinceridad y además tenía el cinismo de sonreír mientras hablaba. – Pero matar al hombre no está en los planes de hoy.

Tenía tu muñeca atrapada en una de sus manos y prácticamente podías sentir tus huesos crujir más no mostraste malestar alguno en tu rostro impasible. Era un misterio como el hombre había noqueado a tu asaltante con un simple abanico y a la vez evitado que convocaras a tu shikigami (1).

– Intentó atacarme, una acción bastante estúpida si me permites decirlo. – Te liberaste de un brusco tirón en cuanto aflojó la presión que estaba haciendo sobre tu muñeca. – Sus intenciones estaban lejos de ser buenas. Solo iba a impartir justicia.

Lo viste hacer una mueca, fue muy sutil, pero el leve tic en sus comisuras te indicaba que no estaba a gusto con tu respuesta, aun así volvió a sonreír. Sentías que quería decirte algo, pero optó por darte un par de palmadas -bastantes bruscas- en la espalda con una actitud despreocupada del mundo… y eso te irritaba más de lo que creías.

– ¡Pues no tienes nada de qué preocuparte! – Abrió el abanico frente a su cara, ocultando la amplia sonrisa por detrás – Es mi trabajo encargarme de las personas como él. Puedes seguir tu camino en paz Onmyoji-san (2).

Fue esa última frase lo que corroboró tu hipótesis de que no estabas frente a una persona normal. Detrás de la actitud odiosa se ocultaba un ser al que, quizás en un principio, habías subestimado. No cualquiera podía identificar a un Onmyoji.

*

(1)    Shikigami: son una especie de fantasmas o familiares que se hacen presentes a través de pequeños muñecos hechos de papel. Su poder depende de la fuerza espiritual de quien los convoque. Muchas veces toman la forma de animales e incluso poseen personas.

(2)    Onmyoji: personas  especializadas en la magia y la adivinación. Se encargaban de llevar cuenta de los días del calendario y mantener alejados a los malos espíritus. Podían anticipar influencias dañinas para el mundo y convocar Shikigami.

Jiriki {Tenka Kumo x Lectora}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora