Me encontraba sentado junto a la entrada de la casa de Luciana. Ella había salido. No sé por qué lo hizo. Ella debía quedarse en casa. Debía solo estar conmigo.
Decidí traerle sus chocolates favoritos y un álbum de fotos viejas. Fui muy selectivo con ellas. Traté de eliminar todos las fotos de personas que habían sido amigos de ella, no quería que los recordara. Borré las imágenes de sus padres. Dejé las fotos de todos esos que la molestaban, así recordaría cuan mala es la gente del mundo y la mayoría eran fotos de nostros juntos.
Así debía ser.
-Hola.- dijo ella, estaba parada junto a mi.
-Hola.-Me levanté y la abrace.
-Entremos.- agregó.
Eran las cuatro la tarde pero todas las ventanas y persianas estaban cerradas. El olor a whisky barato se impregnaba en toda la casa.
En la sala, sobre el sofá, se encontraba el padre de Luciana. Era repugnante.
Ella me guió hacia su habitación. Era la única sala que olía bien. No era un lecho de rosas pero era agradable.
Faltaba ventilar por lo que abrí su ventana.
-Me voy a cambiar. - ella dijo.
Sacó sus ropas quedando en sujetador y bragas. Comencé a analizar cada centímetro de su cuerpo. Su cabello estaba recogido en un rodete por lo que pude apreciar cada detalle con suma precisión.
Sus piel era muy blanca, pálida. Sentía que podia ver a través de ella. La palabra "grasa" es imposible de nombrar. Sus huesos sobresalen de su piel. Ella es escuálida. Como era de suponer, no es voluminosa. Tiene muchas marcas rojas, cicatrices. En brazos, piernas y algunas en su vientre. Además alrededor de su cuello tiene un aura violeta, consecuencia de la última borrachera agresiva de su padre, trato de ahorcarla.
Ella cubre su cuerpo con una camiseta de hombre. Siempre usa de esas. Le quedan bien en un modo extraño.
-Estoy pronta.- dijo sacándome de nis pensamientos.
-¿Cómo te sientes?- pregunté
- Me siento Bien. - respondió ella.
-¿Segura?- Insistí.
-Si.-
-¿Qué es estar bien para ti?
- Bien es sólo una palabra que digo para no dar explicaciones innecesarias. - se sentó en mi regazo. - Eres tan lindo.-
Él contacto de su cuerpo con el mío me encendió. Ella puso su frente contra la mia, enrollo sus delgadas piernas alrededor de mi cintura. La tome por la cadera y presione levemente contra mí. Ella río.
-Me encanta eso.- dijo
-¿Qué cosa?- pregunté
-Tener control sobre ti.-
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N/A : Luciana siente que es quién controla? cómo reaccionará Lucas a su comentario?Gracias por los votoos lectores y lectoras ♥♥♥♥♥
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You are mine.
Dla nastolatkówLucas se enamora de Luciana, su mejor amiga. Este muchacho de 19 años desarrollará una extraña obsesión hacia ella, que le hará actuar de un modo extraño, casi psicópata. Confunde obsesión con amor, un maldito grave error. Si te gusta el drama y l...