I'M FINE -Markhyuck-

┆IV

Haechan se encontraba en su habitación echo una bolita sobre su cama, inconscientemente había recordado aquel día de práctica donde se había sentido feliz.

Muy feliz.

No podía negarle eso a nadie incluso logró ver una suave sonrisa en los labios de Jungwoo en aquella memorable situación, en ese momento en el que se sintió muy querido.

Mark le había dicho que no le molestaba sus muestras de afecto, pero al analizarlo bien no había articulado ninguna palabra como respuesta, solo había respondido con un gesto, él sabía que había algo raro, pero lo cegó la felicidad que sintió al ver la aceptación que le daba su hyung, sin embargo no dijo nada para no preocupar a sus mayores.

Un toque en su puerta hizo que saliera de su burbuja y se levantara de su cama, contra su voluntad claro, para abrirla.

No se sorprendió al ver a su mayor parado frente a él por lo que se hizo aún lado dejándolo ingresar a su habitación.

—Jungwoo hyung... pensé que nunca vendría. —dijo regañando en broma el castaño tomando la silla de su escritorio sentandose luego en esta.

—Lo siento, estaba agotado por las actividades que tuvimos hoy y quería descansar un poco. —rascó su nuca algo avergonzado pero luego se enderezó.

El moreno asintió comprendiendolo, él también quiso descansar pero la diferencia es que había algo que atormentaba sus pensamientos, cosa que no le permitió dormir en lo absoluto.

—No te preocupes hyung, querías hablar conmigo... ¿qué era?. —preguntó cautelosamente colocándose en pose de indio sobre la silla.

—Voy a ser directo Donghyuck, ¿tú quieres mucho a Mark verdad?.

—Si, quiero mucho a Makku— respondió con una sonrisa en su rostro y con sus mejillas de un leve color carmesí.

—Creo que al parecer no me has entendido bien Hyuck.

—¿A qué se refiere hyung?.

—¿Te gusta Mark?.

El menor al escuchar aquella pregunta no pudo evitar sonrojarse mucho, más de lo que estaba, mientras jugaba con sus manos como si fuera lo único que pudiera hacer en esos momentos. ¿Le gustaba Mark? Nunca se había tomado el tiempo necesario para pensarlo y mucho menos para quizás aceptarlo.

Es decir, le gustaba cuando pasaban tiempo juntos a pesar de que no era tanto.

Le gustaba cuando era atento con él y lo ayudaba cuando había cosas que él no podía hacer, sobre todo le gustaba su sonrisa.

Si algún día estuviera triste con tan solo ver a Mark sonreír cambiaría de emociones, incluso sentiría el pulso acelerado de su corazón.

Ok, ahora que se lo ponía a pensar, había una alta posibilidad de que le gustara.

Alzo su mirada para encontrarse con la de su hyung que esperaba pacientemente su respuesta, talvez se dio cuenta que estaba en pleno debate mental y decidió darle el tiempo necesario, lo cual le agradecía internamente.

—Hyung... yo...

—Si o no Hyuckie.

—Si, me gusta.— respondió finalmente el menor algo avergonzado por haber revelado sus sentimientos en aquel momento y de aquella forma. Pero no le importaba mucho en realidad, se había liberado con una persona de su confianza.

Por otro lado, aquella respuesta había sorprendió al pelinaranja pero tuvo que habérselo esperado, porque era obvio en la manera en que Haechan trataba al canadiense.