Cartels And Pleasure (l.s.)

XV

—¿Entonces Lou? - dijo nervioso con una sonrisa.

—Harry, creo que...- suspiró - ¿No crees que es muy pronto?

—Pero sería muy lindo- insistió -estar todo el tiempo juntos y pod...

—No Harry- lo interrumpió -no lo haremos.

La felicidad que Harry tenía al principio se esfumó al escuchar eso. No podía entender a Louis, era demasiado estúpido decir eso. Para mudarse juntos era muy pronto, pero sí de tener sexo o irse a otro maldito continente se trataba, Louis sentía que era el momento perfecto para hacerlo. Ahora Harry se sentía demasiado estúpido al haber propuesto eso, se sentía humillado, muy avergonzado.

Se quería regresar a la casa, pero para su puta mala suerte, no sabía nadar y tenía que pedirle ayuda a Louis. Otra cosa que odiaba de sí mismo.

— Llévame de regreso a la orilla, por favor- murmuró bajando la cabeza.

—No, Hazz...Hablemos de es...

—Dije que me lleves a la orilla.

—Pero amor...

—No me digas amor, maldita sea, y llévame a la jodida orilla, si no quieres que me ahogue. Que lo que menos quiero es estar ahora contigo, y si quieres seguir teniendo a tu puta personal para follar, me vas a llevar a la orilla- dijo alzando la voz.

Harry estaba demasiado dolido, lo cual era mucho peor que estar molesto, porque no se sentía enojado o algo así. Quería llorar, pero quería hacerlo a solas, y quería dejar de estar abrazado a Louis.

Louis simplemente nado sin decir absolutamente nada y llegó a la orilla, soltando delicadamente a Harry. El rizado solo se giró y salió del mar, caminando hacia la casa.

El castaño se sentía terrible al rechazar a su novio, pero era necesario. Sin embargo, no podía llegar y decirle "No quiero que vivas conmigo porque tengo cientos de armas en mi casa, y en cualquier momento me van a descubrir y te pueden matar".

No si quería seguir con Harry un poco más.

Vio como el pequeño entró a la casa y cerró la puerta corrediza de cristal para seguir caminando dentro. Suspiró y salió del agua, tomó las toallas que habían tomado para secarse y las llevó consigo para llegar a la casa.

Al entrar se dirigió a la habitación y al intentar abrir la puerta, esta estaba asegurada.

—Amor, abre la puerta y hablemos por favor.

—No, porque vas a terminar pidiéndome que me quite la ropa y no tengo ganas de follar.

—Abre ahora, Hazz. Solo quiero asegurarme de que estás bien.

Escuchó unos murmullos detrás de la puerta y luego el seguro quitarse. Esperó unos seguros hasta escuchar de nuevo los murmullos y abrió lentamente, vio a Harry de espaldas, cubierto con las sábanas y probablemente sollozando, debido al movimiento que notaba en estas.

—No eres mi puta personal.

—Estoy bien, ya me viste, ya te puedes ir.

—No eres solamente sexo para mí, Harry. Tú crees que no me molesta lo que dices, pero si lo hace, y me lástima que digas esas cosas, me haces sentir un idiota. Creo que no te has dado cuenta de todo lo que estoy haciendo por ti, principalmente el forzarme a mí mismo a tener una relación que nunca quise porque tú me lo pediste. Y vienes a hacer tus berrinches, me estoy hartando de esto y de ti.

Y Harry esperaba escuchar cualquier cosa, menos eso.

Giró y cuando Louis vio sus ojos cristalizados, se dio cuenta de lo que había dicho. Sí que la cagó en grande.