Capítulo 1.

14 1 0
                                    


Correr era parte de su rutina diaria, claro no precisamente para ejercitar más bien era excesivamente impuntual. ¿Cómo era posible que en tantos años nunca lo echaron del programa de residentes de cirugia? Era más que afortunado por ser apreciado por el director médico del hospital. Estaba seguro que su jefe le gritara al segundo que lo vea, son las 6:20 a.m. las rondas empezaron hace 20 minutos, le darán al interno más inútil por su falta de compromiso a entrar a la hora correspondiente según el plan de trabajo. Desliza su credencial en el marcador que da apertura una puerta de cristal que lo dirige hacía las escaleras del segundo piso del edificio adentrándose en el pasillo de vestidores, duchas y salas de descanso. Observa aquel bajito hombre de cabellos oscuros, se encuentra de espalda por lo que el castaño decide en un intento en vano de regresar sus pasos y no ser reprendido, pero una vez más es tarde.

-Dr. Kim Taehyung ¡Si por mi fuera estarías despedido desde este justo momento! - su mirada es severa, un ceño fruncido mientras con su mano izquierda hace gesto al castaño que debe acercarse. Taehyung hace lo indicado, trata de no verle a los ojos desde el momento que grito su nombre sabía que no tendría escapatoria.

- Me lleva el diablo contigo, es tu primer día como especialista y ni siquiera te dignas en venir temprano para fingir un poco de compromiso. Debes dejar esta actitud tan ociosa, no eres un interno que se perdió en el hospital en su primer día. Eres un maldito especialista que yo espero se convierta pronto en titular. Pero con este comportamiento deseo arrojarte a la calle.

El castaño sólo asiente con su rostro, consciente que las palabras de su jefe eran completamente acertadas. El Dr. Do Kyungsoo era su mentor, tomó su especialidad con él aunque desde su primer año de interno ya tenía la atención del mayor sobre cada uno de sus actos. Caminaban entre los pasillos adentrándose en el piso de ingresos hospitalarios donde se detienen en la estación principal de enfermería. Una joven de tez morena que portaba hiyab escondiendo su cabello, cuello dejando únicamente a la vista su rostro. Combinaba perfectamente con su uniforme celeste cielo que portaban los residentes.
-La Dra. Rostom será tu interna esta semana. Ella es muy capaz y estoy seguro te llevará el ritmo tan particular que tienes Kim. - el Dr. Do tomo el expediente postrado sobre la superficie de la estación. Lo arrojó al aire siendo atrapado entre las manos del castaño. - Kim tienes interconsulta en oncología obstétrica desde hace 20 minutos. Encargate de no echarlo a perder.

Suspira poniendo los ojos en blanco en gesto sarcástico. Con una seña de manos le indicó a su interna para comenzar a caminar entre los pasillos en dirección a oncología, Taehyung no era fanático de visitar aquella área de hospital le parecía deprimente cada expediente que revisaba entre líneas, estaba consciente que su jefe lo enviaba para formarle más carácter y se acostumbre a no mezclar emociones con esa clase de situaciones. A estas alturas era casi inmune a esos rostros agotados por la quimioterapia, a lágrimas que las mujeres sueltan a mares en sus dosis de hepcertin pero la pequeña espina o debilidad siempre causa punzadas en su empático corazón.
-Dr. Kim, después de esta consulta me indico el Dr. Do que tiene rondas en el área de observación al parecer uno de los titulares de Cardiologia tuvo un percance y no vendrá hasta mañana. Quieren que de seguimiento para dar las altas que corresponden hoy. - La morena guardo silencio observando de reojo a su superior. Quien en aquel instante no prestaba atención a ninguna de su palabras, el castaño se encoje de hombros manteniendo su paso apurado como si fuera la solución a reponer el tiempo perdido por su impuntualidad o al fiasco de papeleo administrativo que tenía que completar por el inconveniente en la última cirugía que fue ayudante. Tan absorto en su propia mente que no vuelve a la realidad hasta que es frenado de golpe al chocar contra alguien más.

-Vaya, quien diría que ni siquiera al unirte a los niños grandes se te quita lo descuidado. - una risa bastante suelta y animosa acompaña dichas palabras. El hombre de cabello marrón oscuro quien lo porta perfectamente recogido dejando su rostro prolijamente expuesto. Una sonrisa enorme es dedicada a Taehyung mientras se acomoda apropiadamente su corbata sutilmente desaliñada.
-Dr. Jung, en verdad discúlpeme. Fui muy imprudente al no fijarme por donde camino.... Yo... - el castaño titubea nervioso, no tenía ni una hora de estar en turno y ya tenía suficientes descuidos para tener una amonestación verbal.

A corazón abierto: [KookV]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora