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-Hot

Llegamos a nuestro destino, Hawaii.

Llegamos a una preciosa cabaña con una preciosa vista al mar.

Esto era hermoso.

Chris aventó la maleta en el pasillo y me abrazó por detrás mientras besaba mi cuello.

Venía cansada, pero no importaba, quería acción, deseaba a Chris tanto como el me deseaba a mi.

-Ven esposa mía..-Dijo mientras caminábamos hacia la habitación.

Estaba adornado de rosas y velas, realmente romántico.

Nos paramos frente a la y me miró con una enorme sonrisa.

-Eres mía y serás mía para toda la vida, te amo, te amo con cada parte de mi..

-Te amo más Christopher-Dije con una sonrisa.

El se deshizo de mi ropa para después deshacerse de la suya.

Por primera vez, después de tanto estábamos uno frente al otro totalmente desnudos.

Nos entregaríamos, nuestros cuerpos se unirán para formar uno mismo.

Ni siquiera me daba vergüenza estar desnuda frente a el, el ahora es mi esposo y me vería así siempre.

El pudor se fue, todo se fue, no me importaba nada más que el.

Me pegó a él y me besó.

Entre beso y beso caímos a la cama, yo encima de el.

Llené de besos cada parte de su rostro, cuello y torso.

Su abdomen parecía una barra de chocolate, ME HABIA PERDIDO EN SU ESCULTURAL CUERPO.

Quería mostrarle a mi ahora esposo lo que soy capaz de hacer y lo que puedo hacer para hacerlo sentir bien.

Me encantaba el sexo, era una fanática del sexo.

Bajé hasta su pene y lo miré con una sonrisa pícara.

-Dios mío..-Dijo Chris en un suspiro.

Tomé su enorme pene entre mis manos y comencé a hacerle un oral, escucharlo pedir por más y gemir como loco me llenaba aún las de placer.

-Be... Bebé...-Decia el con dificultad mientras me tomaba de la cabeza para hundirme más en el.

Chris

Sin duda alguna me había sacado la lotería con una hermosa mujer, MI MUJER, SOLO MÍA.

Me haría estallar de placer, me encantaba más que fuera igual de caliente que yo, podía notarlo.

Lo único que no me gustaba mucho era que al parecer ella ya tenía experiencia en estás cosas.

Verla comerse a mi amiguito hacia que el corazón se me saliera del pecho.

Era perfecta, no tenía duda que Kylie era la mujer de mi vida, sería la más importante, pero no la única ni la última.

Después Kylie terminó de matarme y eso que apenas íbamos comenzando, COMENZÓ A HACERME UNA RUSA.

-FUCKKKKK-Dije pasando mi mano por mi cabello.

Dejé caer mi cabeza hacia atrás, fue lo mejor que pude haber hecho.

Kylie siempre será lo mejor que pudo pasarme, se los juro.

QUERÍA EMBARAZARLA ESTA MISMA NOCHE, QUERÍA QUE ABRIERAMOS LA FÁBRICA DE BEBÉS HOY.

No quería uno, quería 5 con ella y los otros 5 que me los den mis otras esposas.

Volteé a verla y ella sonrió, ME MATOOOOOOOOO.

La jale hacia a mi boca y la besé para después posicionarla debajo de mi.

Ella sin pensarlo abrió las piernas y me puse entre ellas.

-¿Eres virgen?-Dije besando su cuello.

-No...-Contestó ella con dificultad.

Dejé de besarla, NO SABEN LA FURIA QUE SENTÍ DENTRO DE MI, MI MUJER YA FUE TOCADA POR OTRO Y ESO NO ME GUSTABA PARA NADA.

ATADA A TIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora