6

2.3K 121 25
                                    

La noche ya estaba presente, ella y yo teníamos una muy peculiar cena.

Nos hacíamos preguntas mientras que cenabamos cereal en su balcón bajó la luz de la luna.

-¿Enserio no comes cerdo?-Dijo ella impactada.

-Mi religión no lo permite, además de que el cerdo es muy malo, deberías dejar de comerlo

-Tengo toda mi vida comiendo cerdo y mírame..

Yo reí, amaba estos debates sobre nuestras culturas y las religiones.

Aunque no entendía la religión católica, intentaba ser lo más respetuoso posible.

Quería explicarle que mi religión solo busca el bien.

Después de ese debate, ella tomó los platos y se levantó para dejarlos en la cocina.

Yo igual me levanté para tener mejor vista de su trasero, mordí mi labio inferior y suspiré.

Después voltee a ver la cama e imaginé todas las cosas sucias que haré con ella cuando sea mi mujer.

Una sonrisa se formó en mi rostro, espero que Dios me perdone pero esta mujer hace que quiera romper las reglas.

-¡Listo!-Dijo entrando a la habitación-¿Qué más quieres hacer?-Preguntó ella.

-¿Te molesta si me voy a dormir?-Dije mirándola-Estoy muy cansado, este horario me está mandando

-¡Oh claro!-Dijo ella con una risita.

Me tomo de la mano y me llevó hasta la habitación que había enseguida.

-¡Aquí dormirás tu!-Dijo ella acomodando la cama.

-Me parece bien..-Dije mirándola detenidamente.

Ella sonrió y se acercó a mi.

-Ten una linda noche, cualquier cosa no dudes en decirme..-Dijo antes de besar mi mejilla.

-Gracias, tu igual ten una linda noche..-Respondi yo también besando su mejilla.

Ella me dedicó una hermosa sonrisa y salió de la habitación.

Sin pensarlo cerré la puerta y comencé a masturbarme.

ELLA ERA TAN SEXYYYYYYY MOVÍA TODO EN MIIIIII, QUERÍA METERME A LA CAMA CON ELLA AHORA.

Después de que terminé, busqué algo para limpiarme.

Abrí un cajón, miré ropa de hombre... No se imaginan todo lo que sentí dentro de mi.

La furia se apoderó de mi, intentaba controlar mi respiración.

Subí mis boxers junto con mi pantalón, apreté mis puños con fuerza y comencé a golpear la cama.

¿Y si estaba saliendo con alguien? NOO, NO PODIA SER, KYLIE ES MÍA DESDE QUE PUSE MIS OJOS EN ELLA.

Debía tranquilizarme y no perder la cordura.

Las horas pasaban, intentaba tranquilizarme, enserio solo ver eso me hacía sentir furioso.

Entré al baño, era un baño compartido, sin pensarlo abrí lentamente la puerta de Kylie.

Ella ya estaba dormida, MIERDAAAAA ME VOLVÍA LOCO.

Me adentré a su cuarto y me puse a observarla.

Ella era tan perfecta, dios mío..

Mordí mi labio inferior, ¿Cómo no excitarme con semejante mujer?

Metí mi mano dentro de mi pantalón y comencé a masturbarme otra vez.

MIERDAAAAAAAAA, MIERDAAAAAAA QUERÍA PENETRARLA.

No podía más, salí de la habitación con cuidado y me introduje a la mía.

Solté un último gemido que me hizo sentir más que extasiado.

Mañana, mañana mismo la enfrentaría no quiero que me vea la cara de estúpido...

[......]

El sol ya estaba a todo su esplendor, salí de bañarme y me cambié.

Salí, ella estaba en la cocina preparando no se que cosa.

Tomé la ropa que estaba en el cajón y me paré frente a ella.

-¡Buen día Christopher!-Dijo ella con una sonrisa.

-¿De quien es esto?-Pregunté serio frente a ella..

ATADA A TIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora