Capítulo 02

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No entendía que hacía ahí, así que se acercó a ella saliendo hacia el balcón también

—¿Qué haces aquí? —pregunta arrecostado en la puerta

—Quería salir a ver todo, tomar algo de aire, me gusta aquí —responde

—Está haciendo frío, te resfriaras —dice

—Tengo tú suerter gigante —responde como si fuera una niña contradiciéndolo

—Tus piernas están descubiertas —las señala

—Buen punto...—lo ve —No es justo siempre que digo algo tú ganas —dice cruzandose de brazos

—Quizá porqué siempre tengo razón —responde orgulloso

—No es justo...pero te lo dejo pasar —ve al frente

—Anda, vamos adentro es tarde —dice parándose bien

—Ve tú, yo iré luego —responde sin verlo

—No te estoy preguntando, es una orden —insiste

—Tú no puedes mandarme ojos bonitos —responde ella

—Soy mayor que tú, y si quiero lo hago —responde caminando a ella

—Si yo creo que no —lo ve

—Adentro —repite frente a ella

—¿O qué?, ¿qué vas a hacer señor mandón? —ella lo desafía

Ambos se veían de cerca, pero era claro que Derek no iba a perder ésta infantil discusión - que es como él consideraba eso - así que la tomó a ella de la cintura y la levantó del suelo, aprovechando que ella no pesa nada, y además, es más pequeña que él.

—¡Hey!, ¡sueltame! —ella se queja

—No —responde dando la vuelta

—¡Derek! —dice ella intentando safarse

—Eso no te servirá de nada, pesada —dice el burlon caminando hacia dentro

—¡Jum! —dice ella molesta cruzandose de brazos —No soy pesada...—susurra

—De hecho no, no eres pesada en físico, pero me refería a tú actitud —responde él cerrando la puerta con el pie

—¡Ya bajame! —le dice

—Si eso quieres —responde

Él la soltó y ella cayó sentada al suelo, se quejó pero se levantó rápido y mientras sobraba su trasero se acercó a Derek quien reía de verla así.

—Escuchame bien señor mandó —lo señala — Si acepté venir es porque tenía hambre, no quería andar allá afuera sola y tenía frío, no para soportarte —le dice frente a él

—Y yo no te dejé venir sólo para soportar a una pesada como tú —se agacha a su nivel

—No tengo tiempo de escuchar a un abuelo hablar —dice ella dándole la espalda cruzada de brazos

—Ni yo a una niña de cuatro años —responde caminando a otro lado

Ella lo volteo a ver por encima de su hombro y lo alcanzó a ver como se metía a la cocina, así que aprovechó a seguir caminando por el Loft y ver las cosas que habían ahí.

Ver la cama, una mesa de metal con papeles, unas lámparas, el sofá y la otra pequeña mesa, para ser un lugar grande estaba vacío pero se notaba que él vivía solo al no tener tantas cosas.

Y mientras caminaba dio la vuelta y chocó con él de frente.

—¿Podrías no aparecer cómo fantasma? —ella lo ve

Love Fight - teen wolf Donde viven las historias. Descúbrelo ahora