Ya había pasado tiempo desde que aquel plan de formar un reino científico había dado inicio. Algo que definitivamente no había sido fácil.
Para que estemos todos en contexto.
La guerra contra Tsukasa ha terminado ya hace poco, fue un periodo largo y duro para nuestros protagonistas.
Una guerra que pasaría a la historia como la que decidiría el rumbo que tomaría el nuevo mundo.
Y cómo Senku ya había prometido, no había bajas.Bueno, prácticamente.
Tsukasa ahora yacía descansando en un sueño helado, puesto que sus heridas eran algo que no iban a poder curar con la tecnología que poseían, así que el plan de conseguir un aparato de petrificación ya estaba en marcha.
Pero antes, aún había una misión que Senku llevaba posponiendo por mucho tiempo, prácticamente por un año entero.Aunque siendo honesto consigo mismo, no estaba seguro de si era correcto llevarla a cabo, después de todo, tenían prioridades, y el líquido de la vida ahora les era limitado...
———
Una mañana como cualquier otra para el pueblo de Ishigami, aunque por fin eran tiempos tranquilos, sin el temor de ser atacados en cualquier momento, y sin la presión de tener que prepararse para una guerra que apostaba por todo.
La gente pasaba su día con total calma, exepto por un solo individuo, que seguía dando vueltas y vueltas en su mismo lugar, tratando de tomar una decisión.
No debería tomar un desvío, ya tenían un objetivo nuevo para continuar con los avances de la civilización, pero...
—¡Agh! Maldita moral humana, malditos sentimientos humanos...—
Se quejaba en voz alta, mientras pateaba un árbol, haciéndose daño a sí mismo en el proceso, soltando así un quejido aún mas fuerte.
Esto último llamó la atención de otra persona que pasaba felizmente por ahí, el gran musculoso amigo de aquel genio, quien de hecho entró en pánico al escuchar el quejido.
—¡Senku! ¡¿Estás bien?! ¡¡No puedes morir!! ¡¡¡ERES LA ESPERANZA DE LA HUMANIDAD!!!— Exclamaba mientras corría a toda velocidad a dónde se encontraba el joven de pelo blanco.
—¡Deja de armar un escándalo tan temprano! ¡Cabeza de músculo!— Reclamó en respuesta mientras sobaba con dolor su pie.
Taiju suspiró con alivio al ver que no estaba pasando nada grave, pero aún así estaba intrigado.
—Oye, no es que esté juzgando, pero por qué pateaste ese árbol? No parece que haya estado haciendo ningún daño— Preguntó el más grande mientras inclinaba su cabeza son confusión.
Senku solo chasqueó la lengua y se volteó, no queriendo contestar realmente.
Sabía qué reacción tendría Taiju de inmediato, y lo ayudaría a buscarla moviendo mar y tierra, y no sonaba en lo absoluto mal, pero tenían el deber de concentrarse en el barco que apenas estaban planeando hacer.—A mí me parece que alguien está conflictuado, llevo un rato viendo la misma expresión en él— Comentó un chico con cabello bicolor que salía de detrás de un árbol distinto.
Quiso maldecir al mentalista, lo había asustado ligeramente con su aparición, pero también le molestana que parecía leerlo muy bien, así solo terminó haciendo un gesto de desagrado.
Cruzó sus brazos sobre su pecho y soltó un suspiro profundo, no sabía qué responder para evitar el asunto, así que trató de soltar cualquier tema al aire.
—Tal vez sea el silencio constante, ¿a ustedes no les incómoda? no haría mal un poco de entretenimiento musical, a veces llega a cansar el solo escuchar el disco de Lillian—
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¿Cantamos Juntos? [Senku X Lectora]
FanfictionMe pregunto si podríamos volver a ser lo de antes.