Helado

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Celeste salió del baño viendo que sus amigas aún estaban en el lugar... Se veían muy concentradas en su conversación así que decidió no interrumpir, talvez hablaban de un tema importante que no le incumbia... Así que se acercó al mostrador donde estaba Joseph limpiando

- Disculpe señor mesero, ¿que tiene que sea gratis? - exclamó bromeando

- Lo siento señorita pero para usted las cosas cuestan el doble - respondió siguiendo el juego

- ¿Y porque a mi? - sonrió fingiendo estar ofendida

- Porque yo creo las reglas aquí - sonrió de manera orgullosa

- ¡A mi no me engañas niño listo! - respondió - Tu no eres el jefe de este lugar - su sonrisa cambió de ofendida a orgullosa

- Técnicamente lo soy... Mi tío es el dueño del lugar así que eso me hace el jefe - su batalla por tener la razón se intensificaba

- ¡Oye Joseph regresa a trabajar! - ordenó el verdadero jefe

- Valla valla... ¿Quien lo diría? - dijo la rubia - ¿Que te parece si por mi victoria me invitas a... ✨Todo lo que pueda comer✨? - sus ojos se iluminaron

- Lo siento, pero no tuviste ninguna victoria... Y además no creo que me alcance para tanto - se burló y regreso a trabajar

- Eres muy malo - respondio riendo, luego saco su celular - ¡Oh no ya es tarde! ¡Debo irme! - exclamó de la nada tomando sus cosas, Joseph se acerco - Excelente servicio joven, siga así - el río y ella corrió fuera del lugar

Unas calles adelante, vio a los famosos héroes Ladybug Chat Noir, daban vueltas por todos lados, no les tomó mucha importancia, aunque fueran celebridades eso no la hacía que estuviera tan interesada... En un par de minutos llegó a su destino, y si... Ya la estaban esperando...

En el departamento de Alexa, ella estaba recostada sobre su cama viendo el techo... Pensativa... ¿Que había hecho? Rechaso a su amigo ¿Porque? Porque era su amigo ¿Porque no lo pensó más? Porque tomar decisiones apresuradas siempre la había identificado...

- Me siento rara... - suspiro y tomo su celular... Los miles de mensajes que le mando a su amiga Celeste hace dos minutos aún no habían sido contestados ni leídos... ¿Que estaba haciendo?

Se levantó de su cama y se dirigió a la cocina... Abrió el refrigerador, y... ¡Oh no! ¡Ya no había helado! Suspiro pesadamente y cerró la puerta, se dirigió al baño tomó su cepillo y peinó su cabello, tomó sus zapatos se los puso y salió del lugar, no había de que preocuparse por lo que digan los demás, ella solía salir en pijama a la calle para comprar cosas... Mas que todo helado... Las primeras veces se vio extraño pero luego ya era algo normal... Claro que no llegaba lejos así, apenas su cursaba la calle... Tenía suerte de que la heladería estuviera frente al edificio en el que vivía...

Ella entró y en cuanto la persona que trabajaba ahí la vio, camino hacia donde tenían guardados los botes de helado y tomó el sabor que ella siempre compraba

- Hola Alexa - saludo la empleada como siempre, con una sonrisa

- Hola Jenni - saludo ella de igual manera

- Lo mismo de siempre ¿no? - pregunto

- Tu sabes lo que me gusta - respondio

- Aquí tienes - dijo entregándole el bote de helado

- Me salvas la vida - le entregó el dinero y salió del lugar, fue a su departamento, se sentó en el soda, encendió la televisión y comenzó a comer su postre favorito... No se sentía deprimida, más bien rara, no era la primera vez que se le declaraban... Pero si era la primera vez que lo hacía un amigo cercano... La dejó pensativa, y eso la hacía sentirse rara... Entonces decidió hacer lo que hacía cada día libre en el que sus amigos tenían planes... ¡Comer helado y ver series y películas! ¿Acaso se podía desear algo mejor?

En el hotel Legran't París, Chloe estaba en su habitación, en el sofá con sus piernas sobre las de Luka mientras veía su celular, él hacía lo mismo...

- ¡Esto es ridículo! - exclamó de la nada asustando a su novio

- ¿Que cosa? - pregunto sonriendo, amaba sus reacciones, ¡eran unicas!

- Lila y Kagami están molestas porque "no escuche lo que ellas decían" - se quejo lanzando su celular lejos... ¿Que importaba si se rompía? Podía comprar otro

- ¿En que cosa? -

- Sobre un plan para separar a la panaderia de mi Adrienbu - respondio

- ¿Porque sigues llamándolo así? Yo soy tu novio - reclamo con celos - Además... ¿Pará qué quieres separarlos tu? ¿Acaso te gusta? -

- Adrien no me gusta, somos amigos desde pequeños, y desde un principio era la única razón por la que no quiero que estén juntos... Y sigue siendo la misma razón -

- ¿Solo porque son amigos de la infancia? - se había confundido

- No me agrada Dupang-Cheng... No quiero que Adrien este con alguien como ella... - rodó los ojos y el peli negro sonrio

- Te ves linda cuando te enojas - dijo de la nada, ella se sonrojo - también cuando haces eso - lentamente tomó las piernas de su novia, se dio vuelta en su dirección y las puso alrededor de su cintura

- N-no hagas eso - dijo ella intentando disimular sus nervios, el se acerco

- ¿Hacer que? - respondió y tomó sus muñecas poniendolas sobre sus hombros - ¿Te mensione que cuando disimulas que no estás nerviosa te ves muy... - fue interrumpido por un beso, que fue muy bien correspondido, luego se separaron por la falta de aire

- Callate - explamo ella

- Si me callas así, creo que nunca dejare de hablar - sonrió de manera coqueta y la volvió a besar, ella correspondió de inmediato como si ya lo esperaba...

Unos segundos bastaron para que Luka a costará a Chloe en el sofá quedando sobre ella sin parar de besarla y poniendo sus manos sobre su cabeza, se separó un poco y la vio a los ojos, tenía las mismas intenciones que el... Era muy obvio, así que sonrieron y...

- ¿Que fue eso? - alguien había tocado la puerta... ¿Porque siempre los interrumpian? Chloe se puso de pie, se fijo en que no tenía nada fuera de lugar y abrió la puerta... ¡Era su padre!

- ¿Todo bien por acá? - pregunto inocentemente

- Si - respondió de manera fria, extrañamente el era quien los interrumpía casi siempre... Era la razón por la que no pasaban de besos

- Más tarde iremos al aeropuerto, tu madre viene de visita - ella se puso feliz de inmediato

- ¿Encerio? - su padre asintió - ¡Eso es genial! ¡Estaré lista antes que ella llegue! - se despidieron no de una manera algo fría, ambos tenían prisa, y Chloe asoto la puerta y se dirigió al armario, luego observó a su novio algo perdido - ¿Que haces ahí sentado? ¡Ven y ayúdame! - el sonrió y le hico caso

Problemas Del Destino Donde viven las historias. Descúbrelo ahora