Capítulo 8

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Al día siguiente llegaron Ginny y Luna y fueron a recojer a Ron a casa de Draco, Harry no estaba había salido a comprar comida así que abrió Draco llamó al pelirrojo y este estaba recogiendo sus cosas.

En la puerta Ginny y Draco se veían con sumo desprecio peleando con la mirada quien era mejor hasta que llegó Ron se despidió de los Weasleys y Lovegood cuando estos se ibas Harry venía llegando así que se despidió de Ron y las chicas entró al apartamento y los demás se fueron.

Por la tarde Ginny entró en la casa de Malfoy el cual estaba dentro de Harry mientras este gemia fuertemente.
La chica no tocó la puerta simplemente la abrió y entró mientras estaba en la sala se percató de los gemidos de Harry y está pensó que Draco lo estaba lastimando así que rápidamente reviso el baño, el cuarto de huéspedes, la cocina hasta llegar al cuarto donde estaban los chicos.

Ambos tenían los ojos cerrados pero cuando la Weasley entró Draco los abrió y le grito a Harry:
-Harry!!! Harry!!! Potter!!!
Harry estaba entradisimo que parecía no escuchar lo que Draco le estaba gritando mientras que Ginny los observaba desde el marco de la puerta a Draco se le ocurrió parar
-Que ocurre? - preguntó Harry mirando a Draco desde el ángulo en el que estaba
Draco sólo señaló a Ginny y cuando Potter miró a la chica inmediatamente bajo de Draco y ambos chicos taparon sus partes.

Harry le preguntó a Ginny que estaba haciendo ahí esta respondió:
-Ron olvidó su cartera, vine por ella y escuché tus gritos, pensé que Draco te estaba lastimado pero ya vi que no,me voy lindo día.

Ambos chicos esperaron a que saliera del apartamento e irónicamente siguieron en lo suyo.

Ron constantemente iba a visitar a Harry por que Draco le daba mal augurio.
Impidiendo que los chicos tuvieran la intimidad que tanto les gustaba.
Las chicas estaban en la misma situación con Ron ahí,aunque ambos se engañaban mantenían en secreto el hecho que no eran pareja y aunque Ginny los descubrió en pleno acto no dijo ni una sola palabra a Ron.

Una noche Ron se fue y los chicos comenzaron...
-Gatito...hoy es mi turno
Draco gimió fuertemente y soltó otro gemido aún más fuerte cuando Potter puso su miembro en la entrada de el rubio.
En toda la casa se podían escuchar los gimoteos desesperados de Draco.
-Más papi!!!
-Más gatito?
-Si papiiiiiii
-Me...me falta poco cariño
Cuando los chicos se corrieron Draco soltó un tremendo gimoteo.
Pasaron unos minutos y Harry volvió a meter su miembro en la entrada del otro chico, terminaron y así repetidas veces hasta el amanecer, los chicos se fueron a trabajar sumamente cansados y débiles.

Dear Drarry Donde viven las historias. Descúbrelo ahora