capitulo 3

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Luego de unos 5 minutos caminando llegue a la cabaña. Entre en ella, no había nadie y estaban las luces apagadas, lo único que iluminaba el pequeño salón era la luz de la luna, pero al llegar 10 minutos antes no le di importancia. El piso de madera, los espejos en cada pared y las barras de metal eran conocidos para mi, lo único diferente fue que estas ultimas estaban tan frías como en un día de invierno. El problema es que estamos en verano.

Empecé a calentar mis músculos, cuando me percate de la llegada de alguien, ese alguien era Mariana. Su pelo enrulado, sus pecas y sus ojos marrones no son ninguna razón por la cual nos llevamos mal, si no por su actitud de quererse destacar sin mover su dedo meñique.

-¿Que haces acá?- dijo ella con su voz irritante, otra de sus cualidades era querer tener a todos controlados.

-Vengo a la clase  ¿vos a que venís?¿a estorbar?- dije irritada por su comportamiento

-¿Que clase? deja de mentir, seguro venís a robarte algo, pobre- 

En ese momento muevo mi hacia el costado, aguanto la respiración e intento contar hasta 8 para calmarme. En vez de calmarme, una fea sensación se apodera de mi. Comienzo a sentirme mareada y se me nubla la vista. Lo ultimo que escucho antes de desmallarme son gritos y una voz diciendo "arriba".

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Perdon, por  lo corto pero la cosa es menos sucesos y mas acción.

BALLERINADonde viven las historias. Descúbrelo ahora