Una Tormenta de risa en la quietud del Jingshi

Capitulo 8

Hace calor.

Eso es lo primero que nota Lan Wangji cuando lentamente vuelve a estar consciente.

Se siente agradablemente cálido y ... casi libre de dolor.

Al darse cuenta de esto, abre los ojos con sorpresa al ver solo la tenue luz de una lámpara iluminando la habitación y una figura oscura acurrucada cerca, con la cabeza apoyada en sus brazos en el borde de la cama, inmóvil.

Lan Wangji inhala. Se siente mareado pero por lo demás... extrañamente bien. Aún le duele la espalda pero es un dolor que parece lejano, mucho más débil que antes, empieza a sospechar que durmió mucho tiempo.

Se le ofreció esto en un momento; los curanderos lo habrían puesto a dormir con sus agujas durante el tiempo que sus heridas tarden en sanar, lo suficiente como para que ya no tenga que quedarse quieto.

No quería eso por el bien de A-Yuan. De lo contrario, habría accedido con mucho gusto a no alimentarse y bañarse, cambiarse de ropa o necesitar ayuda para hacer sus necesidades mientras lo tocaban constantemente y no podía escapar. Todavía lo odia, aunque finge que no le importa.

Con mucho cuidado mueve los brazos. Está nuevamente acostado de costado, solo un poco para aliviar su pecho de su propio peso, pero no para presionar las heridas en su hombro derecho. No puede usar su brazo derecho en absoluto en esta posición, pero tiene un poco más de libertad con su brazo izquierdo.

El cabello de Wei Ying está suelto; la cinta para el pelo "¿es una coincidencia que sea morada?" se ha aflojado. Lan Wangji solo tendría que mover su mano un poco la masa oscura que se extendía a su lado, brillando levemente a la luz de la lámpara.

Lan Wangji no recuerda cuándo se sintió tan bien por última vez. ¿Qué sucedió? Qué ...

Lo último que recuerda es llorar, llorar como un niño en los brazos de Lan Huan mientras Wei Ying tocaba Wangxian, una canción que solo ha escuchado dos veces en sus vidas; en la cueva de la Tortuga de la matanza y años después, en otra cueva, aunque no parece recordar eso.

Lan Wangji respira profundamente. No desea centrarse en esto. Lo que tiene ahora es más de lo que pensó que volvería a tener.

Wei Ying se mueve y murmura algo antes de estremecerse y levantar la cabeza con un gemido y una maldición.

"Las blasfemias están prohibidas en Cloud Recesses", murmura Lan Wangji, sorprendido de sí mismo por encontrar estas palabras tan fácilmente.

"¡Lan Zhan!" Wei Ying le sonríe, los dientes se iluminan en la penumbra. "¡Estas despierto!"

"Minnesota."

"¿Cómo te sientes? ¿Te acuerdas?"

"Tú ... eliminaste la energía resentida de mi cuerpo".

"Sí. De hecho, podría quedar algún residuo que ni siquiera yo puedo rastrear, pero si es así, entonces no debería ser un problema. Podrás lidiar con eso ".

Lan Wangji asiente. "¿Cuánto tiempo ha pasado?"

Wei Ying extiende la mano y ajusta la manta con la que está cubierto Lan Wangji. No, no una manta. Es la bata. Por eso se siente tan cómodo.

"Hace un día y medio", suspira Wei Ying. "Es la segunda noche. Estuviste dormido todo el tiempo. Tuviste una ligera fiebre la primera noche y temí excederme, pero por la mañana bajó y no volvió a brotar. Los curanderos parecían algo satisfechos con el aspecto de las heridas cuando le cambiaron los vendajes anoche. ¿Cómo te sientes?"

"El dolor ha disminuido significativamente. Puedo moverme más fácilmente ". No se siente más fuerte : deshacerse de la energía del resentimiento no ha hecho crecer mágicamente los músculos que ha perdido a lo largo de los meses. Eso todavía va a ser un largo proceso de recuperación. Es demasiado pronto para eso: cuando levanta el brazo o intenta cambiar de posición, el dolor sigue empeorando.